PDI frustra estafa a adulto mayor con conocido cuento del ‘balurdo’

LOS ANDES.- La intervención de testigos y la rápida respuesta de funcionarios de la PDI evitó que un adulto mayor fuera víctima de estafa con el conocido cuento del fajo de billetes que en su interior contiene solo papeles de diario.
La víctima fue abordada en plena plaza de armas poco después de haber retirado dinero desde la sucursal del Banco de Chile ubicada en calle Maipú. El estafador se hizo pasar por analfabeto, comenzando a contar la conocida historia, situación que fue advertida por transeúntes que alertaron a la PDI, concurriendo hasta el lugar oficiales de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec).
El Comisario de la Bridec, Oscar Mesa Leiva, indicó que al efectuar un patrullaje encontraron a la víctima junto al estafador en la esquina de calles O’Higgins con Rancagua, en momentos en que se producía la estafa.
“La víctima tenía en su poder un fajo de billetes y le estaba haciendo entrega de dinero en efectivo al imputado. Al realizarle un control de identidad y revisar el fajo el cual tenía por encima un billete original de 10 mil pesos y en su interior tenía solamente papel de diario doblado simulando ser billetes”, explicó el oficial.
El comisario precisó que en ningún momento el adulto mayor se percató que estaba siendo engañado por el delincuente, “y solo se percató cuando nosotros hicimos el control policial y le hicimos ver el fajo de billetes que eran papeles”.
Agregó que la víctima le estaba entregando al imputado la suma de 200 mil pesos a cambio del balurdo.
El timador fue identificado como Alfonso Mauricio Silva Villarroel, de 43 años, oriundo de Osorno y con antecedentes por delitos de estafa.
Por disposición del fiscal de turno el maleante fue puesto a disposición del Tribunal de Garantía de Los Andes.
Ante esta situación, el Comisario Mesa reiteró el llamado a las personas, sobre todo adultos mayores o de la tercera edad a no caer en este tipo de engaños y cuando acudan a un banco a girar dinero, hacerse acompañar de otra persona, “porque lo que los delincuentes hacen es persuadir a la víctima para que no revise el fajo”.