Menor de 6 años sufre quemaduras al reventarse guatero con agua caliente

Las quemaduras si bien no fueron profundas, resultaron bastante dolorosas, alcanzando parte de las piernas.
Santiago Estay, padre del menor quemado, llamó a la comunidad a no utilizar guateros.
Santiago Estay, padre del menor quemado, llamó a la comunidad a no utilizar guateros.
  • Padre advierte sobre riesgos con este tipo de elementos:

Se emociona Santiago Estay al recordar el accidente que sufrió su hijo Jeremías, de 6 años, luego que el ‘guatero’ que tenía con agua caliente para calentarse se reventara quemándole los glúteos y parte de las piernas al menor.
El afectado contó a nuestro medio lo siguiente: «El otro día (martes) fuimos a la tienda Plastikón y compramos dos guateros, uno para mi hija y otro para mi pequeño que tiene 6 años. Mi señora le echó un poco de agua, le saqué el aire, lo metimos dentro de la fundita que trae y mientras nosotros fuimos al baño a acomodar la lavadora que estaba mal puesta, ahí fue cuando escuchamos al niño llorar y decir que se había quemado. Lo fui a ver, tenía el calzoncillo puesto, se lo bajé y le eché agua helada para que le bajara un poco el dolor. De inmediato tomé el auto, tomé al niño y me fui al Plastikón a hablar con el caballero. El hombre igual se portó bien… me pidió las disculpas correspondientes. Bueno, yo sé que con las disculpas el niño no va a sanar, en todo caso igual yo quería hacer una demanda, pero no quiero hacer nada porque él (el dueño) tampoco tiene la culpa», dice el padre.
El único objetivo de hacerlo público es para recomendarle a la gente que no le pongan guateros a los niños porque es peligroso.
Cuenta que el primer día «dormimos muy poco debido a la posición que debe dormir el niño luego del accidente. Él está acostumbrado a dormir de espaldita y esta vez tenía que dormir de guatita, eso es molestoso para él y para nosotros porque el niño lloraba. Me acosté con él un rato hasta que se quedó dormido de nuevo. A uno como padre le duele porque son sus hijos, tiene su potito lleno de ampollas, duele verlo así porque es un niño muy activo, hiperkinético total y ahora verlo todo decaído con su dolor; no puede ir a la escuela, tampoco puede sentarse, tiene parches en el potito, sus nalgas las tiene todas quemadas, más encima se había caído, se pegó con una piedra, tiene como podrido ahí, más la quemada, duele verlo así. Hay gente que me ha apoyado», sostiene.
– ¿De la tienda Plastikon le dijeron algo, le ayudaron con algo, alguna crema?
– No, nada… nada, lo único que el caballero me devolvió la plata de la compra y me pidió las disculpas correspondientes y eso fue todo».
– ¿Qué pasó con el guatero?
– Lo entregué… lo devolví.
– ¿Cómo fue que se reventó?
– Simplemente se reventó.
– ¿Era de alguna marca conocida?
– No… no, yo compré el guatero… no compré marca. El niño pesa 20 kilos, es imposible que lo haya reventado con el peso de él o alguna cosa, él se lo puso al lado del potito para calentarse porque lo tenía helado ya que estaba sentado en el suelo, lo mandamos a acostarse ese día porque hacía mucho frio y tenía sueño y sucedió lo que sucedió. Menos mal que yo tenía a mano agua helada, que estaba bien helada, se quejó un poquito por el agua helada, ahí le dije que era la única solución por ahora para que se te quite el dolor. Lloré cuando le eché el agüita, mi hijo es bien hiperactivo y en ese momento no hacía nada, estaba quietito, triste, se quejaba del dolor y eso a uno como padre le duele.
– ¿Has gastado en cremas o algo así?
– Hasta el momento… no, espero que el niño esté bien, las heridas no fueron tan profundas como para decir, pero para ellos es un dolor fuerte; imagínense, para uno es doloroso y para ellos peor.
Dice que a él como padre le ha afectado mucho, ha dormido poco porque se tiene que acostar al lado de él debido al sufrimiento de su hijo; tiene que mantenerlo de lado o con el abdomen hacia abajo, teniendo en cuenta que el menor está acostumbrado a dormir de espalda y le es incómodo.
Añade que llevó a su hijo al Cesfam Doctor Segismundo Iturra donde le indicaron que las quemaduras no eran tan profundas.
El nombre del menor es Jeremías y su padre Santiago trabaja en los estacionamientos de la Feria Central ubicada en el terminal de buses de San Felipe.
Intentamos comunicarnos con la tienda al fono que aparece en su publicidad, pero dice que el teléfono no está disponible.

Las quemaduras si bien no fueron profundas, resultaron bastante dolorosas, alcanzando parte de las piernas.
Las quemaduras si bien no fueron profundas, resultaron bastante dolorosas, alcanzando parte de las piernas.

35 comentarios

  1. Lo escuche por la radio en la mañana y el afectado dijo que no iba hacer nada, malo esta, porque su hijo fue quien se quemo, también escuche que el dueño solo se limito a devolver el dinero a cambio del producto. Alguien deberia asesorar a esta persona. El daño causado al niño no es algo tan simple.

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