PUTAENDO.- La Familia Iturrieta Manzano, al igual que muchas otras familias de la parte rural de Putaendo, son las encargadas de mantener viva una de las tradiciones religiosas más antiguas, conocida popularmente como velar a la Virgen.
Cantos a lo divino, bailes chinos, interpretaciones artísticas, eucaristía y cena criolla en comunidad conforman solo algunas de las tradiciones que van de la mano con esta antigua costumbre rural, que según el destacado payador, poeta y cantor a lo divino, Pedro ‘Choro’ Estay, instauraron los jesuitas hace más de 400 años cuando trataron de evangelizar a los nativos, ocupando ya en aquellos años los primeros pasos de lo que posteriormente sería el canto a lo divino, y a raíz de ese canto surgieron en los campos de Chile los primeros velorios en honor a la Virgen, tradición que se ha mantenido por muchos años a lo largo del país y que Pedro Estay asegura, se mantiene más viva que nunca en los sectores rurales de la comuna, donde prácticamente todos los fines de semana en estas fechas se realiza un velorio en las comunidades rurales de Putaendo, lo que no ocurre en gran parte de la zona urbana de la comuna.
La señora ‘Luchita’ Manzano es hoy la matriarca de la conocida familia Iturrieta Manzano, y quien desde hace 18 años en forma ininterrumpida vela el mes de enero de cada año a la Virgen de Andacollo en su hogar, para lo cual junto a sus hijos, nietos y gran parte de la familia se encargan de preparar durante varios días lo que será este velorio que durante más de 12 horas recibe a una importante cantidad de cantores a lo divino, bailes chinos y grupos artísticos que ofrecen su arte en honor a la Virgen de Andacollo, lo que se materializó el pasado sábado, cuando en su hogar del sector de Granallas, la Familia Iturrieta Manzano, desde las 16:00 horas y hasta cerca de las 04:00 de la mañana velaron a la Virgen de Andacollo.
En esta tradicional, antigua y patrimonial costumbre, los dueños de casa, manteniendo viva la tradición inculcada por sus antepasados, atienden a las visitas con onces, el infaltable canelita, vino navegado, empanadas de pino y en la noche todos son invitados a probar la cazuela, charquicán o pollo asado. En esta ocasión era la misma Luchita Manzano la encargada de invitar personalmente a todos los asistentes a sentarse a la gran mesa para compartir un exquisito plato de comida.
El Padre Pedro Salinas llegó la tarde del pasado sábado hasta el sector de Granallas y ofició una emotiva eucaristía a un costado de la imagen de la Virgen de Andacollo, resaltando el rol protector de la virgen, además de recordar que mientras existan familias como la familia Iturrieta Manzano que mantengan vivas estas tradiciones, que para la iglesia son sumamente importantes, pues los conocidos velorios, el canto a lo divino, el baile chino y otras costumbres más son sinónimo de fe y respeto hacia Dios y la Virgen, lo que la Iglesia Católica valora y agradece enormemente.
En este velorio, parte de los integrantes del Conjunto Folclórico ‘Esteban Vargas’ del Hospital Psiquiátrico, también quisieron estar presentes bailando en honor a la Virgen de Andacollo y entregando sus tonadas. Posteriormente todos los presentes, después de escuchar la eucaristía del Padre Pedro, siguieron atentamente las hermosas presentaciones de los cantores a lo divino.
No nos queda más que felicitar a tantas familias del Valle de Putaendo que mantienen viva aún una de las tradiciones más antiguas en el mundo religioso, y que en este caso la familia Iturrieta Manzano nos permitió mostrar a la comunidad, donde la señora Luchita durante muchos años ha inculcado valores sólidos a sus hijos y descendientes, sobretodo en su tremenda fe religiosa, que incluso la llevó hace muchos años a donar el terreno donde hoy está emplazada la capilla de Granallas.
Patricio Gallardo M.