- A poco más de cuatro meses que se produjo el fatal incidente, familiares piden que se agilice la investigación.-
En el mes de agosto pasado la ciudad de San Felipe quedaba consternada al conocerse el hecho de que Roderick Castro Castillo, joven de 32 años y padre de familia, recibió el impacto de una bala loca en su cabeza cuando estaba en su trabajo en la planta de Esval en el sector poniente de nuestra ciudad.
El hombre, quien estuvo internado en el Hospital San Camilo y posteriormente en Viña del Mar, lamentablemente falleció producto del impacto balístico que se alojó en su cabeza.
Los meses han pasado, sin embargo, aún no hay claridad de cómo ocurrieron los hechos; y lo más importante, quién o quiénes son los responsables de esta tragedia.
Natalia Castro, hermana de Roderick, habló con Diario El Trabajo y relató cómo ha sido todo este tiempo sin su hermano, además de pedir a la justicia agilizar la investigación.
La mujer señaló que «en el tema penal no hemos tenido mayores respuestas, la última actualización de la carpeta investigativa fue en septiembre, yo pedí una nueva actualización y no nos llegó hasta el momento, faltaba el informe balístico y testimonios por lo que tengo entendido».
Misma petición han realizado a la empresa en la cual el joven trabajaba, sin embargo, no han tenido una respuesta positiva. «De parte de las empresas tampoco hemos tenido respuestas, salvo cuando mi hermano estuvo hospitalizado, pero cuando lo enterramos no pasó nada más, después les pedimos ayuda legal para hacer más presión, pero se negaron», indicó Natalia.
Pasa el tiempo y el temor a que el caso se pueda cerrar sin encontrar responsables crece en la familia. «Tenemos miedo que esto se cierre, hasta el momento no se ha realizado querella alguna, ni siquiera se ha formalizado toda la investigación. Por eso queremos generar presión por todos los medios», agregó la hermana.
Respecto de cómo han sido estos meses para la familia después de la tragedia, la mujer sostuvo que «ha sido de bastante incertidumbre, porque no nos han asegurado nada, yo estoy más metida en esto, mi papá trabaja en el norte y no pasa mucho tiempo acá y mamá no está en condiciones de hacerse cargo».
