Joven mujer vive verdadera e inhumana ‘tortura burocrática’:
- Menor de un año diez meses falleció por inmersión tras caer a una piscina el pasado viernes 16, y a pesar de todo el dolor que eso les genera, su familia no ha podido llorarlo ni sepultarlo porque han estado haciendo trámites sobre trámites.-
En toda sociedad, por muy precaria que pueda ser, incluso en muchas especies animales, la muerte ocupa un lugar preponderante. Los rituales fúnebres son inherentes a toda cultura humana. Nadie queda indiferente cuando la muerte toca la puerta de un ser querido, pero cuando ese ser querido es un niño, un menor de edad, un hijo, entonces hasta los enemigos suelen lamentarlo.
Por eso no podemos quedar indiferente ante la desesperación que embarga a una joven madre de 23 años de edad, debido a que en el Servicio Médico Legal de San Felipe no le han entregado el cuerpo de su hijo de un año diez meses, quien perdió la vida por inmersión tras caer a una piscina en su casa el pasado viernes 16 de diciembre en la noche. El motivo sería que faltan documentos debido a que se encuentran ilegales en Chile.
Gilda, mamá de Lian, calificó como terrible lo que está viviendo por el trágico accidente de su hijo, y aún así no puede estar tranquila en su casa, llorándolo, porque tiene que estar realizando trámites. «Tengo que estar haciendo papeleos de allá para acá, me piden que vaya para un fiscal, me regreso, voy para la municipalidad, voy por aquí, para allá. Fuimos a la embajada de Venezuela, traemos un papel que me lo dio la embajada, que con eso según me lo iban a entregar, y ahora me piden la orden de un juez. Entonces voy a ir a la orden de un juez, ¿qué más me van a pedir? Me dicen que tengo que tener paciencia, que dentro de dos o tres meses me van a dar alguna cita para apostillar los papeles y ahí a ver si con eso me sirven y dar el niño, después de dos, tres meses. Quiero tener a mi hijo en la casa y darle su cristiana sepultura, no puedo porque somos ilegales. Mi hijo vale más muerto que vivo, porque yo a mi hijo le traté de sacar sus papeles de la escuela del Cesfam, y ahí nadie dice ‘este niño es robado o este niño de dónde viene’, pero muerto mi hijo sí vale, sí necesitas identificar muerto»… Gilda no puede seguir hablando porque estalla en lágrimas, totalmente choqueada, llorando de desesperación.
Por su parte Juan, hermano de la madre y tío del menor fallecido (Lian), reiteró que han vivido momentos terribles. «Lo hemos hecho todo, Lian tuvo este accidente el día viernes», dice.
– Podemos explicar qué paso ese día, para graficarle a nuestros lectores.
– Ese día Lian tuvo el accidente alrededor de las 10 de la noche, yo ni siquiera pude llamar a la ambulancia, tuve que salir a pedir auxilio en la calle, los vecinos me ayudaron, de verdad que recibí mucho apoyo en el Hospital de Los Andes, en el San Camilo, de verdad que muy agradecidos.
– ¿Él cayó a la piscina?
– El cayó a la piscina, tuvo un accidente y producto de eso tuvo la muerte por inmersión, le decretaron muerte cerebral. El tema es que al niño le decretaron muerte cerebral y ahora ha sido un trámite terrible, nos enviaron a la embajada con todos los problemas que nosotros tenemos como país, legales, mandar apostillar algo es algo inhumano. Nosotros tenemos acá el niño muerto y nos mandan a sacar un papel apostillado, donde en Venezuela común y corriente dura tres, cuatro años. Chile está al tanto de lo que está pasando con nosotros, saben la cantidad de extranjeros en situación irregular que estamos acá en Chile, todo lo que está sucediendo; o sea, este es un tema humanitario, se está parando por un protocolo. Es una burocracia terrible por parte de medicina legal, ha sido terrible la atención, el maltrato psicológico que tiene mi hermana, no hemos podido dormir nada. Yo pasé todos estos días cuidando que mi hermana no atente contra su vida, imagínese, mi hermana está muy mal, su hijo de un año diez meses murió y de esta forma tan terrible tenemos que estar en esa casa, nosotros queremos salir de allí.
– ¿Dónde viven ustedes?
– En Villa La Parva en Los Andes.
– ¿Qué documentación le están pidiendo?
– Ellos nos están pidiendo una partida de nacimiento apostillada.
– ¿Qué significa eso, apostillada?
– Tenemos que ir a la embajada y colocarle una apostilla, que ya fuimos. La embajada no está emitiendo en estos momentos apostillas, nos dieron un documento que lo sellaron y validan que mi hermana es la mamá de Lian Gael, ese documento reemplaza al otro, fue lo que nos entregaron, que consta en un documento venezolano, tiene todos los sellos debidamente, y ahora nos dicen que necesitan todavía una cédula apostillada, entonces imagínese, una madre desesperada sacando todo este tipo de documentos, y ahora quieren que vamos a un tribunal a pedir una resolución. Y después de esto qué más nos van a pedir, qué otro capricho.
– ¿Le han ido pidiendo ‘de gota a gota’?
– ‘De gota a gota’. Creíamos que con lo que nos iba a dar la embajada (Venezuela) teníamos para que nos entregaran a nuestro niño. La fiscalía entregó todos los documentos, hemos tenido el apoyo de la municipalidad, del jardín, un abogado particular que ha hecho todas las gestiones, y aún así no nos quieren entregar el niño.
El menor falleció en el hospital San Camilo y la caída habría sido luego que un perro abriera una ventana justo en los momentos en que su madre preparaba la cena.
¿QUE ES LA APOSTILLA?
La apostilla consiste en una certificación única que permite legalizar documentos públicos para que sean válidos tanto en Chile como en el extranjero. Antiguamente, para lograr esta autentificación, se debía acudir presencialmente a diferentes instituciones públicas.