Tal como sucede todos los años en esta fecha, el Alcalde Jaime Amar llegó hasta la escuela especial Sagrado Corazón de la comuna de San Felipe a entregar los regalos de Navidad para los niños que asisten a este establecimiento.
La escuela, que año tras año ha ido aumentando su matrícula, llegando para el año 2012 a casi 100 niños, estaba preparada para recibir la visita del jefe comunal y los niños estaban ansiosos esperando los regalos.
Esta es una tradición que Amar mantiene desde los primeros años de su administración, momento en que los niños, muchos de ellos de muy escasos recursos, reciben alegres y muy emocionados el regalo.
«Desde hace mucho tiempo, desde que el señor Amar es alcalde se ha preocupado de venir a dejar personalmente los regalos y nosotros estamos conscientes que como escuela no nos corresponde, pero él ha tomado este momento como suyo y todas las navidades viene él con su grupo de la Municipalidad y nos traen regalos», señaló la directora del establecimiento, Doris Lucero.
Este es el último año de ejercicio de la directora, ya que por estos días se acoge a retiro, después de cumplir 4 años como directora y casi 43 de docencia, dejando a la escuela con metas cumplidas, y también con desafíos, como el hecho de conseguir contar con una piscina terapéutica.
«Positivo el balance, la escuela ha crecido con la ayuda de los colegas, de los asistentes de la educación, de los apoderados, aquí tenemos un equipo muy firme de mucho entusiasmo, de alegría, de contagiar en esta idea de hacer participar a los apoderados y a los niños. El desafío es que la escuela crezca, para el próximo año están proyectados tres nuevos cursos y la construcción de 3 nuevas salas y el sueño, así como teníamos el sueño del furgón que se cumplió, el sueño es tener una piscina terapéutica para la escuela, donde todos los niños puedan realizar sus actividades kinésicas en la piscina».
Lucero sostuvo que la idea es seguir planteándose metas en grande, tal como ha sucedido hasta ahora en el interior del establecimiento, metas que con la ayuda de las autoridades se han podido lograr, señala la directora.
Todos estos logros son destacados y valorados por los apoderados, quienes ven día a día el avance de su niños, muchos de los cuales no mostraban mejorías, pero donde el trabajo personalizado ha podido ayudarlos.
«Encuentro súper bien, no esperaba este regalo, yo agradezco todo lo que le regalan a mi hijo, si es ropa, una polera, todo, porque yo estoy agradecida por él, es una forma de ayudarme en la navidad, estoy muy agradecida, él es mi tesoro , yo lo cuido, y siempre estamos juntos, si tiene alguna actividad, yo voy con él», confiesa emocionada Víctoria Cáceres.
El hijo de Victoria lleva dos años asistiendo a la escuela especial. El niño nació prematuro de seis meses y con una parálisis cerebral, lo que lo mantiene en una silla de ruedas, pero con el apoyo de los profesionales de la escuela ha podido avanzar, ya dice mamá, papá y varias palabras, señala orgullosa Victoria.