Un completo plan de contingencia para enfrentar la festividad de Año Nuevo tiene previsto el servicio de urgencia del hospital San Camilo de San Felipe.
Se trata de una planificación que establece el centro asistencia ante este tipo de fechas más complejas, que contempla un turno completo de profesionales, además de un cirujano de llamada, que está disponible para concurrir a ayudar en caso de alguna emergencia, a lo que se suman otros profesionales que están preparados en caso que se les requiera y que la emergencia sea de magnitud, entre los que también se suman jefes de servicios y hasta el director del hospital.
Aunque la celebración de Año Nuevo está calendarizada en un fin de semana normal, sin días feriados, de igual forma el San Camilo tiene una planificación, ya que siempre existe la posibilidad de que ocurra una desgracia.
«Lamentablemente es así y para eso tenemos que prepararnos, lo que esperamos de corazón es que no tengamos que lamentar accidentes, ojalá a nivel país», señaló el director del establecimiento, doctor Daniel Álvarez.
Según el facultativo, los principales casos que se presentan en estas fechas son accidentes de tránsito, debido a la imprudencia de los conductores respecto del consumo de alcohol o no descansar el suficiente tiempo antes de colocarse detrás del volante.
«La imprudencia y el consumo de alcohol son los más relevantes y en este fin de semana se podría agregar el cansancio y el sueño de los conductores que van a trasnochar el día 31 y van a seguir el día 1 y van a tratar de regresar a sus lugares de trabajo el día lunes, lo que a mi juicio influye en un factor más de riesgo».
A esto se suma, según Álvarez, los accidentes que protagonizan los niños debido a los fuegos artificiales.
«Lamentablemente todos los años se han hecho campañas y han ido disminuyendo algunos casos, es un riesgo que nuestros niños resulten heridos y quemados por los fuegos artificiales y ese es el principal temor que tenemos. Ojala que la población lo entienda así y cuide y evite este tipo de accidentes, está nada más en la responsabilidad de nuestra población: no beber si va a conducir, no hacerlo con sueño o cansado y darse el tiempo previo a un viaje largo y cuidar a nuestros niños de accidentes o quemaduras».
Según señaló el doctor Álvarez, la cantidad de pacientes que concurren en estas fechas al servicio de urgencia se ha mantenido estable, no registrándose un aumento importante debido a estas celebraciones.