- Nostalgia y emotividad vivieron los alumnos después de toda una vida sin juntarse, donde incluso llegó su profesora jefe a ‘controlar la asistencia’.-
Este sábado 28 de octubre y luego de largos 44 años, la generación 1979 de alumnos del Colegio Técnico Santa María de Aconcagua, se reunió nuevamente para vivir la nostalgia y recordar aquellos años ‘mozos’ en los que solo eran unos adolescentes. El lugar de la cita de los colegiales fue en la casa de una de las compañeras, en la misma comuna de su querido colegio.
Según comentó a nuestro medio una de las estudiantes de aquella generación, luego de Cuarto Medio los jóvenes tomaron rumbos diferentes en la vida, lo que los llevó a perder el contacto entre sí, hasta que una de las compañeras tomó la difícil tarea de reunirlos en un grupo de WhatsApp y fijar este reencuentro, el cual consistió en una convivencia que estuvo llena de alegría y emotividad.
De los 35 alumnos que conformaban aquel curso, fueron 28 los que llegaron a la reunión de este sábado, en donde uno de los momentos de más emoción tuvo que ver con la asistencia de su profesora jefe y el inspector del establecimiento. Dentro de las diversas actividades que realizaron en la jornada, una de ellas fue cuando la profesora ‘pasó lista de la asistencia’.
En cuanto a esta emotiva reunión de exestudiantes del establecimiento santamariano, luego de 44 años transcurridos, la exalumna Edilia Irarrázaval, comentó cómo se gestionó el encuentro y por qué pasó tanto tiempo. «Claro, después de 44 años nos juntamos, ya que hubo unas chicas que se dedicaron a hacer el grupo por WhatsApp, que fueron las compañeras Vilma y Malvina, y ahí empezaron a contactarnos a nosotros. No nos habíamos juntado antes porque perdimos todos los contactos, porque cada uno salimos con un destino distinto de Cuarto Medio; unos se fueron a distintas partes, como éramos de Santa María y de San Felipe, que íbamos a estudiar allá, entonces, cada uno tomó su destino y perdimos los contactos.
«Las compañeras empezaron a crear un grupo y ahí empezamos a contactarnos para poder juntarnos un día y al final nos juntamos en la casa de la compañera Lucy, en Santa María hacia arriba, en San Fernando, que fue este pasado 28 de octubre. Llegaron 28 alumnos de los 35 que éramos, porque una está en España, otra compañera está fallecida y otros no pudieron asistir por trabajo», comentó.
También la exalumna no ocultó su felicidad por el éxito de su reencuentro, además de referirse a los emotivos momentos que se vivieron, haciendo énfasis en el notorio paso del tiempo. Indicó que «una de las cosas más emocionantes fue que llegó la profesora jefe de nosotros, que tiene que como 88 años, pero estaba como antes, y la emoción porque de todas las actividades que hicimos, nos ‘pasó lista’.
«Fue un éxito, nos juntamos casi todo el curso y ahora pretendemos no perder los contactos. A estas alturas ya todos somos padres y abuelos, y la emoción, porque algunos no éramos reconocidos inmediatamente, porque tenemos nuestras canas, nuestro estado físico, el tiempo está reflejado en nuestros rostros y en nuestro físico, pero fue emocionante. Es la emoción de poder verlos, de poder estar con ellos y conversar, dialogando acerca de que ya somos abuelos, ese era el tema principal, si es que teníamos nietos y que somos todos ‘chochos’ ahora, con nuestras canas presentes», añadió.
Finalmente, Irarrázaval detalló lo que fue la reunión, en la que también recibieron la visita de su inspector, además de la expectativa que tienen por volver a reunirse. «Fue una convivencia que hicimos, picando cositas ahí, otros compañeros tomaban ‘fanshop’, el cafecito, el tecito y la otra emoción que tuvimos fue que llegó el inspector (del colegio) con su esposa y también nos sentimos emocionados, porque nos fue a acompañar. Fue como volver un día al colegio. Esperamos no perder los contactos, ahora siempre estamos en contacto por el WhatsApp y por lo menos ahora, si Dios quiere, nos vamos a juntar nuevamente este 28 de noviembre», concluyó.
