Con una inversión de alrededor de 42 millones de pesos, varios son los trabajos de construcción que se están desarrollando en la escuela Carolina Ocampo, en el sector rural de San Felipe.
El proyecto contemplaba la construcción del cierre perimetral del establecimiento, la normalización y mejoramiento de la multicancha y la construcción de los servicios higiénicos de las manipuladoras de alimentos, trabajos que se encuentran en algunos casos bastante adelantados.
“Siempre hemos manifestado que el cierre perimetral era la prioridad número 1 para la escuela, porque la cancha si bien no estaba en buen estado, pero podíamos hacer clases, pero el cierre perimetral era fundamental porque ingresaban los animales que iban a predios vecinos y entraban a la escuela y nos hacían pedazos los jardines, las plantaciones y los huertos escolares, era un sueño de muchos años”, sostuvo el director del establecimiento, Juan Lobos Araya.
Sueño que se encuentra casi terminado, ya que los trabajos están bastante adelantados.
Desde ahora al contar con este cierre perimetral, los niño se evitarán estar en contacto con los animales de predios cercanos que ingresaban al establecimiento y destruían los jardines y los árboles, situación que ya no sucederá, lo que da cuenta de una escuela más segura para los alumnos.
En la multicancha que también está recién terminada, los alr
ededor de 67 niños con que cuenta esta escuela, podrán realizar las clases de educación física, disfrutar los recreos y realizar la gala artística a fines de año, actividades que desde ahora se podrán realizar con total seguridad.
Todos estos trabajos fueron valorados por los apoderados, quienes también veían el problema del cierre perimetral y hacía insegura la permanencia de los niños durante la jornada escolar.
Sin embargo con esta construcción, los alumnos pueden trabajar tranquilos tanto en sus salas de clases como en el patio.
“Ha quedado todo muy bonito, con más seguridad para los niños, con los recreos más tranquilos, fue una muy buena inversión, le pusieron más seguridad porque los niños se pasaban y tiraban piedras”, sostuvo una de las apoderadas presentes.
Ahora uno de los objetivos de la dirección del establecimiento es volver a encantar a los apoderados de este sector y que vuelvan a enviar a sus hijos a esta escuela.
“La idea es justamente volver a encantar a los apoderados que la hagan suya, porque la escuela es de ellos finalmente, que ellos la valoricen y vean que nosotros estamos haciendo todo el esfuerzo con las autoridades, estamos todos empeñados que la escuela sea lo más importante de la comunidad”, dijo Lobos.