Cuando niña la profesora la expulsó de grupo de gimnasia por ser ‘bajita’

Mujer con enanismo habla sobre la discriminación contra la gente ‘Especial’

Roberto González S. – rgonzalez@eltrabajo.cl

Quizá sea usted de las personas que, en su justo derecho al amor propio, se preocupa diariamente por su apariencia personal, peor aún, en la adolescencia que es cuando sufrimos regularmente del acné y otros cambios hormonales que a veces llaman la atención de los demás, se dirá usted al espejo que la vida no es fácil y efectivamente tienes razón al respecto, sin embargo, hoy conoceremos a Filomena Delgado Cuevas, una sanfelipeña que sí ha tenido que pagar el precio de la discriminación por el simple hecho de ser… diferente.

Nació el miércoles 2 de abril de 1980 en San Felipe, ella es la cuarta de cinco hijos que nacieron del matrimonio conformado por René Delgado y su esposa Verónica Cuevas. A la pequeña Filomena se le dictaminó Acondroplasia cuando nació, un trastorno del crecimiento óseo que afecta a un ser humano cada 25.000 nacimientos. Diario El Trabajo habló con Verónica Cuevas, madre de Filomena, para conocer cómo reaccionó ella al enterarse de que su niña era diferente.

“Cuando el doctor que me atendió supo que mi hija Filomena sería bajita, me dijo que mi hija sería una ‘enana pachacha’, me sentí triste en ese momento, pero pronto ella iluminó nuestras vidas y lo de la estatura nunca más tuvo importancia para la familia (…) Cada vez que ella fue discriminada fuera de la casa, siempre supe animarla y enseñarle a defenderse con dignidad, pero sin violencia”, respondió la señora Cuevas.

A SOLAS CON UNA GANADORA

– ¿Cuándo te diste cuenta de que eras una persona ‘diferente’?

– “Me di cuenta de que yo era diferente, cuando a mis siete años una profesora de Educación Física me expulsó del grupo de Revista y Gimnasia en la que yo participaba. Esa ‘tía’ era nueva. Horrorizada y avergonzada, comprendí que algo era diferente, pues esa profesora me dijo que yo no participaría por ser tan pequeña”.

– ¿Cómo fue tu adolescencia?

– “En mi adolescencia, las burlas y sobrenombres de mis compañeros de clases se incrementaron en mi contra, directamente y en mi cara se reían de mí y me sacaban en cara mi estatura. Otra profesora se burlaba de mí en público, iniciaba chistes y bromeaba por mi estatura, el resto lo hacían mis compañeros”.

– ¿Cómo te sentías cuando te hacían estas cosas?

– “Muy mal, cuando miraba a cabros jóvenes que me gustaban, me sentía morir, porque no era correspondida, estaba segura de que mi gran sueño en la vida, el de ser madre y formar un hogar, jamás se me haría posible, aún así logré terminar mi Básica en San Felipe y continué mi Media en Los Andes; las cosas no mejoraron allá, la burla siempre estaba presente”.

– ¿Académicamente lograste tus metas?

– “Terminé mi carrera de Técnico en Vestuario, aprendí mucho y terminé mis estudios básicos, aún así, las empresas no me contratan en nada, quizá los empresarios suponen que no soy capaz de hacer bien un trabajo, y me niegan esa oportunidad”.

– Tienes una familia ahora, ¿cómo conociste a tu esposo?

– “En un velorio, ahí conocí a mi esposo Luis Sánchez, el padre de mis dos hijas. Nuestro pololeo inició cuando yo le envié una carta, luego de tantas cosas que compartíamos como amigos, le hice la pregunta: ‘¿Tú andarías con una chiquitita de porte, pero grande de corazón?’, él me respondió que sí”.

– ¿Cómo fueron tus experiencias de parto?

– “Mis partos fueron normales, mis pequeñas, Valentina de ocho y Francisca de dos años, nacieron de 38 semanas de gestación, ellas son la esencia de mi vida, me siento una mujer completa, soy feliz y no le envidio nada a nadie, sólo le digo a la Sociedad, que no nos cierren las puertas laboralmente, todas las personas que somos ‘especiales’, tenemos iguales derechos que el resto de los demás”.

Diario El Trabajo también habló unas palabras con Luis Sánchez, esposo de Filomena.

“Yo estoy muy orgulloso de ella, una ganadora, una mujer con quien conformé una familia y la madre de mis dos preciosas hijas, a ella, por ganar esta batalla personal de la discriminación, por eso la felicito”.