Asegurando haber sido engañado por la persona a quien creyó era su amigo, visitó nuestra sala de redacción y con documentos en mano, Juan Herrera Lobo, el sanfelipeño que pagó 1.500.000 pesos por una vivienda de la cual hasta el día de hoy no logra disfrutar. Diario El Trabajo habló con Juan Herrera Lobo sobre esta insólita denuncia.
– ¿Qué es lo que le ocurrió con esta casa?
– «Yo compré una vivienda el 27 de diciembre, casa que está ubicada en Villa 250 Años, los trámites los hice en una Notaría de San Felipe, cuando me hicieron todo el papeleo, los funcionarios no se dieron cuenta de que ‘algo’ no estaba bien, y lo que estaba sucediendo es que este caballero que me vendió la propiedad, tenía un ‘Comodato De por vida’ con la mujer que vivía en la casa en cuestión».
– ¿Todo estaba en regla antes de comprarla?
– «Pues creo que sí, yo nunca pude entrar a la casa antes de comprarla, pero como la casa la encontré buena por fuera y los papeles estaban en regla en la Notaría, pagué el millón y medio que me cobraban por ella, me enamoré de la casa y al tiro la compré, pero nunca me imaginé el problema que me ha generado ese negocio».
– ¿Y no ha logrado entrar en la que ahora ya es su casa?
– «Luego de que hice todo el papeleo y le pagué al señor Enrique Cataldo la casa, fui a tomar posesión de la misma, pero ahí el problema fue que la señora que vive ahí, Carmen Rochert Céspedes, me salió con el chiste de que tiene un Comodato, documento hecho en 1991».
Diario El Trabajo visitó la vivienda en cuestión, misma que estaba cerrada con cadenas y candado y en la que nadie salió, en atención a nuestros llamados, según algunas visitas, la señora Marta siempre está encerrada y con fuertes cadenas en el portón de entrada. Sobre este caso nuestro medio habló con un Asesor Legal, a fin de valorar la situación en la que se encuentra el afectado.
«La señora Marta no tiene muchas posibilidades de poder seguir viviendo ahí, sólo a menos que ese Comodato haya sido inscrito en el Conservador de Bienes Raíces, en el estudio de los títulos de la propiedad, se debió detectar si había o no un gravamen como ese. De no estar registrado, lo que el afectado puede hacer es entablar un Juicio por Precario», explicó Pablo Vergara, socio del estudio jurídico Díaz, Vergara & Asociados Cía. Ltda, a Diario El Trabajo.
Roberto González Short
rgonzalez@eltrabajo.cl
