Molestos por los malos olores y la grasa que botan desde una bodega del Supermercado Santa Isabel de calle Merced, se encuentran dos comerciantes que tienen sus locales comerciales en calle Toro Mazote, a un costado del supermercado.
Los vecinos y comerciantes que hacen público su malestar son Héctor Riquelme y Ana Méndez.
El primero dice que ya en dos ocasiones, una vez el día 11 de de junio y la otra el 15 de julio, el supermercado Santa Isabel ha derramado grasa de los pollos asados, “y esa grasa que cae ha sido derramada acá en dos ocasiones ya, cualquiera se puede dar cuenta del olor pesadito y la cantidad de aceite que hay, incluso una mañana cuando llegué había trozos de pollos, tremendos trozos de pollos”, sostiene Héctor.
Dicen que es peligroso para las personas porque queda muy resbaloso: “Y al final nosotros no sacamos nada con alegar si siguen, siguen y siguen con la misma basura”, dice Héctor Riquelme.
Comenta que en algunas ocasiones la gente que entra a su local le deja sucio porque pisan la grasa y eso queda impregnado en el piso.
Incluso señalan que han ido a Carabineros donde le dijeron que ellos no podían hacer absolutamente nada, tenían que hacer una denuncia en la fiscalía.
Agregan que en dos ocasiones han hecho denuncias ante la Seremi de Salud, obteniendo como respuesta que todo está bien: “No sabemos nada, no nos avisaron a nosotros cuando vinieron, no nos pidieron las fotos, también tomamos fotos la vez anterior, así es que hoy día 15 de julio volvimos a hacer la denuncia para ver lo que ocurre”, comenta Héctor Riquelme, comerciante afectado.
– ¿Han conversado con la empresa?
– “Yo no nunca, la vecina ha conversado con ellos”.
Ana Méndez, la otra reclamante, dice que ella ha conversado y la solución que le han dado es que vienen a limpiar con personal del Supermercado Santa Isabel de calle Merced: “Lavaron solamente lavaron, pero barren hasta la mitad y de ahí queda la grasa”.
– ¿Es la única solución que le han dado?
– “La única solución de la empresa, por eso ahora no fuimos porque van a hacer lo mismo”.
– ¿A qué hora se producen los olores más fuertes?
– “Todo el día, aquí el olor es de todo el día, y cuando se les tapa la cámara es terrible la hediondez… no se soporta”.
– ¿Cuánto tiempo llevan con este problema?
– “Desde que abrimos el local hace unos cinco años, nunca nos ha dado una solución, vienen a limpiar después a destapar la cámara y vuelven a lo mismo, exactamente lo mismo”.
– ¿Cómo se sienten con las respuestas que le dan en la Autoridad Sanitaria?
– “Mal, nos sentimos pasados a llevar, no es justo que nosotros estemos pagando patente, se está pagando todo como corresponde y no nos dan solución alguna.
“Nos gustaría que solucionen el problema, porque cuando se caiga una persona, se haga daño o un niño, ahí yo creo que recién van a tomar cartas en el asunto, mientras tanto y no pase nada, no lo van a hacer”.
Como medio fuimos hasta las dependencias del supermercado, donde nos dijeron que estaban en conocimiento del problema y estaban a la espera de unas tapas para cubrir las cámaras.