- Decreto de escasez hídrica consideraba construir estos pozos, sin embargo el concejo llayllaíno alega que no se pidió permiso al municipio para intervenir una faja que corresponde a un bien nacional de uso público.
En sesión realizada el miércoles, el Concejo Municipal de Llay Llay en pleno acordó oficiar al Ministerio de Obras Públicas, para exigir la paralización de la construcción de las obras de cuatro pozos que considera el gobierno, a objeto de paliar la crisis hídrica, favoreciendo principalmente al valle de Quillota.
Como se recuerda, hace algunas semanas se decretó escasez hídrica para Aconcagua, así como para otros puntos de la región y de la zona central, lo que derivó en la adopción de una serie de medidas, que consideran próximamente la habilitación de los pozos de Curimón, Panquehue y Llay Llay, y en esta última comuna, la construcción de cuatro nuevos pozos.
Extraoficialmente se ha indicado que estos cuatro pozos servirían para surtir de agua a Quillota, disminuyendo la cantidad de metros cúbicos que se envían por el canalón hacia esa zona de la región desde Curimón, lo que permitiría evitar nuevamente el conflicto por las aguas en San Felipe.
Sin embargo, en Llay Llay el concejal Patricio Durán planteó en la sesión del concejo que las obras se iniciaron sin que se notificara al municipio, informándole de la ejecución de las obras y el destino de los pozos, como tampoco se pidió permiso para intervenir el sector considerado para los pozos, ya que corresponde a una faja de bien nacional de uso público, la que es de responsabilidad de la corporación edilicia.
A raíz de lo anterior, el pleno del concejo votó a favor de oficiar al Ministerio de Obras Públicas, para exigir que se paralicen las obras hasta que se soliciten los permisos correspondientes y se informe y socialice las obras y su destino.
El concejal Durán manifestó en entrevista con Diario El Trabajo que “a nosotros siempre este tema, que nos estén ocupando parte de nuestro territorio sin ningún permiso y sin saber las consecuencias, es tremendamente perjuidicial”.
Añadió que “los bienes nacionales de uso público que tenemos a la orilla del Río Aconcagua, a ambos lados, son de responsabilidad municipal, y ahora ahí se están construyendo pozos profundos para extraer agua. Pero los terrenos que son de uso público, aparte de ser administrados por la municipalidad, deben ser solicitados mediante permiso o concesión por cualquier persona u organismo que quiera hacer algo ahí y debe haber un acuerdo de concejo”.
Señaló que “en ningún caso hemos tenido siquiera una información de la construcción de pozos profundos que se están haciendo en el sector de Las Vegas”, a la vez que a su juicio “ha habido una negligencia tremenda por parte de la Dirección de Obras Hidráulicas”.
El concejal aseveró que esta exigencia de paralizar obras y pedir autorización no significa que el concejo municipal pretenda negarse, pero piden que esta iniciativa se lleve adelante conforme a lo que establece la normativa y en este caso, eso implica pedir la autorización municipal de rigor.
Recalcó que esta postura del concejo obedece al hecho que en otras oportunidades la Dirección de Obras Hidráulicas ha tenido actitudes similares, lo que a su modo de ver, pasa a llevar a un organismo serio y responsable de la comuna, como es el municipio y su concejo.
“Ya no es la primera vez, en otras ocasiones han construido pozos y después regularizan. Eso no puede ser”, afirmó el concejal Durán.
MINISTERIO
Al cierre de esta nota no se oficiaba aún al MOP acerca de esta exigencia que está haciendo el concejo municipal de Llay Llay, por tanto, no hubo un pronunciamiento de este organismo de Gobierno, como tampoco de la Gobernadora Patricia Boffa.
Sin embargo, se pudo conocer por fuentes ligadas al MOP que el decreto de escasez hídrica amplía las facultades de la DOH en cuanto a los trabajos a realizar, ya que el fin último es proveer de agua a las comunidades, ya sea para la bebida, los animales o el riego.
De ahí que no habría sido necesario pedir la autorización al municipio de Llay Llay, aunque claro, lo lógico hubiese sido informar y también socializar el tema, más aún considerando la sensibilidad que existe en torno al tema hídrico en todo el valle de Aconcagua.