Para este lunes 9 de diciembre, a las 13:00 horas en las afueras del Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Felipe, está contemplada la diligencia de reconstitución de escena del asesinato de los presos políticos Rigoberto Achú y Absalón Wegner, fallecidos el 13 de diciembre de 1973.
La diligencia fue ordenada por el juez de la causa, Magistrado Julio Miranda Lillo, en el marco del procesamiento e investigación que se sigue en contra de doctor Raúl Navarro, el Teniente Pedro Lovera y los funcionarios de Ejército Héctor Orozco, Milton Núñez y Sergio Jara Arancibia, quienes deberán presentarse en la diligencia, la que se espera permita avanzar en el esclarecimiento de este caso, así como para determinar el grado de responsabilidad de cada uno de los implicados.
Achú Liendo, junto al Doctor Absalón Wegner Millar, dos prisioneros políticos en los inicios de la dictadura militar, fueron objeto de las más horribles torturas, primero a manos de la Policía de Investigaciones, cuando su cuartel operaba en la actual Dirección de Desarrollo Comunitario, y luego en el Regimiento Yungay de San Felipe.
Ambos murieron a manos de funcionarios de Ejército la noche del 13 de diciembre de 1973, estando sometidos a procesos por este crimen precisamente los recién mencionados.
Casi 40 años más tarde, el Ministro de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, Magistrado Julio Miranda Lillo, sometió a proceso a mediados de mayo pasado a los cinco ex uniformados como presuntos autores de este macabro crimen.
Efectivamente, el comunicado que se publicó en el Diario El Mercurio respecto de estas muertes, señalaba que ambos prisioneros políticos, en circunstancias que llegaban a la cárcel de Calle Molina y producto de una avería en el vehículo que los trasladaba, debieron caminar con custodia militar, momento que aprovecharon para darse a la fuga, lo que obligó a los funcionarios castrenses a abrir fuego.
Fue a propósito de una querella presentada por el Ministerio del Interior en julio de 2011, que se abrió una investigación encabezada por el Ministro en visita Julio Miranda Lillo.
Más de 40 testigos han prestado declaración en este caso, cuyo sumario cuenta más de 2.000 hojas.
Los cinco procesados quedaron detenidos en primera instancia en Peñalolén, luego de ser notificados por el juez en el Tribunal de Letras de San Felipe, para tres días más tarde quedar el libertad bajo el pago de una fianza de 500.00 pesos cada uno.