- Concejo municipal aprobó el pago de la subvención 2012 de 15 millones de pesos y para 2013 les aumentó a 20 millones de pesos. Sin embargo, a la fecha solo les han cancelado 10 millones, lo que no cubre los gastos que tiene la institución.
Un ultimátum entregó el Cuerpo de Bomberos de San Felipe a la municipalidad, debido al no pago de las subvenciones de los años 2012 y 2013, por lo que esperarán hasta el 18 de diciembre a que les salden la deuda y si no hay respuesta satisfactoria, no descartan llevar la totalidad de los carros bomba a las afueras del edificio consistorial y entregarles las llaves de estos vehículos al Alcalde Patricio Freire, para que se haga cargo.
La medida fue resuelta la noche del miércoles, en el marco de la reunión del directorio del Cuerpo de Bomberos, donde se mandató al superintendente de la institución, Julio Hardoy, tomar contacto con el municipio para plantearle la molestia que existe, por el incumplimiento de los acuerdos tomados en el seno del concejo comunal, donde se dispuso en primer lugar reconocer la deuda por subvención del año 2012, correspondiente a 15 millones de pesos; y aprobar el pago de subvención por concepto de 2013, aumentándoles el monto a 20 millones de pesos.
El superintendente señaló que en un momento se les planteó no pagar la subvención del año 2012, para sí hacerlo este 2013, ante lo cual el Cuerpo de Bomberos replicó y pidió que se les pagara el compromiso del año pasado y éste no se les cancelara, lo que finalmente se desechó y resolvió cancelarles los 35 millones de pesos en el transcurso de este año.
“Ese dinero no fue pagado en las cuotas correspondientes y ya en agosto del presente, habiendo nosotros agotado nuestros recursos, le hicimos ver a la autoridad la necesidad de cumplir con ese compromiso, que había sido además suscrito en el período de candidato y ratificado ahora que es alcalde. Estos dineros no llegaron y en el mes de octubre nos vimos en la obligación de hacer pública esta situación y se entregó en tiempo muy corto un aporte de 5 millones de pesos, lo que permitía suplir en parte nuestros compromisos, advirtiendo que en diciembre se nos presentaba una situación grave”, explicó Julio Hardoy.
En la noche del miércoles se realizó la reunión del Directorio del Cuerpo de Bomberos, ocasión en la que se discutió el tema y se dispuso adoptar medidas más drásticas, como es dar como plazo último para el pago, el próximo 18 de diciembre. En la mañana de ayer, el municipio emitió un cheque por poco más de 5 millones de pesos a nombre de la institución, pero que según Hardoy, no cubre siquiera lo adeudado de 2012.
“Ninguna institución puede funcionar bajo estas condiciones, más aún cuando tiene que mantener personal rentado, 25 carros bomba, seis compañías, además de atender alrededor de mil 500 llamados de emergencia al año y los más de 3 mil actos de servicio, por lo que esta es una actitud absolutamente impresentable. Por consiguiente, en virtud de los antecedentes que teníamos, el miércoles el directorio que tiene más poder que el superintendente, luego de analizar la situación, tomó la decisión de oficiar al alcalde y solicitarle encarecida y respetuosamente que se nos cancele de aquí al 18 de diciembre, los montos adeudados, en su totalidad”, señaló el superintendente de Bomberos.
Añadió que “esto no es un chantaje ni mucho menos, aquí hay un acuerdo, aquí se hizo un compromiso de caballeros, por lo que esperamos que al 18 de diciembre se nos cancelen las subvenciones adeudadas y comprometidas”.
Explicó el máximo representante de Bomberos en San Felipe, que la institución no está en condiciones de traspasar deudas de 2012 para 2014 y si bien entienden que puede existir un problema de caja, no comprenden cómo no se hizo una proyección económica, para hacer un acuerdo que implicaba liberar tal cantidad de recursos.
Bomberos actualmente tiene dos carros fuera de servicio en la actualidad, debe pagar combustibles y sueldos, en tanto que su cuenta bancaria registra un saldo de apenas 2 millones de pesos, lo que no alcanza a cubrir todos estos gastos, más aún considerando que la reparación de un solo carro significa un desembolso de 7,5 millones de pesos.
“No podemos funcionar así, porque en cualquier momento se nos puede presentar una emergencia y no tendremos los recursos para poder atenderla”, precisó Hardoy.
Consultado sobre la posibilidad de llevar los carros bomba al municipio y entregarle las llaves al alcalde Freire, dijo que “esa es una moción que se presentó en la reunión del directorio general, pero no ha sido votada”.
En caso de no pagarles de aquí al 18 de diciembre, el superintendente dijo que el directorio se reunirá nuevamente y evaluará los pasos a seguir, sin descartar que la moción de llevar los carros al municipio, sea finalmente materializada.