José Luis Cabrera, aunque reconoce que el dinero de la fruta él la recibió y la depositó en su cuenta, al final él también perdió.José Luis Cabrera, aunque reconoce que el dinero de la fruta él la recibió y la depositó en su cuenta, al final él también perdió.
José Luis Cabrera, aunque reconoce que el dinero de la fruta él la recibió y la depositó en su cuenta, al final él también perdió.
José Luis Cabrera, aunque reconoce que el dinero de la fruta él la recibió y la depositó en su cuenta, al final él también perdió.

Empresario sanfelipeño asegura que la única persona que ganó en este negocio fue un tercer empresario y asegura ser totalmente inocente en relación a hechos denunciados por una ciudadana peruana, quien lo señala como el autor del delito de Estafa.

En relación al caso de la denuncia por Estafa que la PDI confirmó estar investigando en contra del empresario sanfelipeño José Luis Cabrera Soto, este mismo se presentó en nuestra Sala de Redacción para explicar su versión de los hechos expuestos por la peruana Inés Gómez Chávez, quien lo acusara por Estafa ante las autoridades chilenas.

 VERSIÓN DE JOSÉ CABRERA

Ante lo anterior y sin aportar documentos ni pruebas de ningún tipo, nada más que su palabra, Cabrera habló con Diario El Trabajo para ‘limpiar su nombre’.

– ¿Qué tiene usted que explicar a las acusaciones publicadas en su contra?

– «Primero que nada quiero aclarar que a esta señora peruana yo no le vendí ni un grano de uva, yo se la vendí a otro empresario sanfelipeño que se llama Miguel Herrera Moreno, el cual es quien hizo el negocio con el marido de ella, hasta ahí yo llegaba».

– ¿Cómo empieza este problema?

– «Lo que pasó es que este señor, Miguel Herrera Moreno, lo que hizo fue embalar esa fruta con logos usados, lo cual no se puede hacer así para exportación, por lo cual la fruta fue rechazada en los frigoríficos de Unifruti en Copiapó, no pudiendo ser fumigado como corresponde para llegar al Perú, lo cual no era mi problema ni me interesaba, lo mío era vender mi fruta y ya la había vendido a Miguel Herrera».

– Si ya usted había cobrado su fruta, ¿cómo aparece de pronto tratando después con la afectada?

– «Cuando a mí me avisan que a esta señora le habían rechazado la fruta, decidí no dejarla tirada acá en Chile, retomé yo su caso para que no pasara más apuros, busqué a un amigo mío llamado Roberto Zelaya, quien me alquiló en $2.800.000 su packing y el personal, a fin de montar ahí una rápida operación y re-empacar la fruta antes que se dañara».

– ¿Por qué la fruta no sale del país esta vez?

– «Terminamos un lunes de enero y nos topamos con la ingrata sorpresa que en los frigoríficos de Unifruti no nos fumigarían la fruta, pues esa empresa fue suspendida por el SAG luego que detectaran el primer intento que se hizo de pasar la fruta con cajas usadas».

– Ella dice que usted le cobró algunos millones de más al precio de la fruta, ¿es verdad eso?

– «En esas condiciones yo le pedí a la señora Inés que me pagara los gastos en los que incurrí en la operación de re-embalaje, mismos que ella había aceptado que yo le hiciera pero ella se negó a cancelarme, ella empezó a hacer escándalos en la ciudad, en los medios locales y especialmente en el packing de Roberto Zelaya, quien no es ni policía ni PDI, es un empresario honorable, en ningún momento a ella se le amenazó de nada».

– ¿Cómo llega su cheque a manos de la señora denunciante?

– «La fruta había que llevarla como fuera a Santiago para venderla, al precio que se pudiera, porque ya se estaba dañando la uva, en ese caso ‘Manuel’, el marido de la señora Inés me pidió un cheque en garantía para que yo me encargara de la venta de esa fruta, es cuando yo le di mi cheque, yo sólo participé en ese trámite de dar alguna garantía».

– ¿Qué pasó con el cheque y finalmente cuánto pagaron por la fruta en Santiago?

– «Antes de llegar a Santiago yo le di Orden de No Pago ‘Por extravío de cheque’, aunque ella intentó cobrarlo antes de lo acordado, (…) ella invirtió $11.200.000, al llegar a Santiago la fruta se remató en $2.000 por caja, 1920 cajas suman $3.840.000, eso pagaron por la fruta».

– ¿Quién se dejó ese dinero, a quién se lo pagaron?

– «Esa plata llega a mis manos, con la cual pago el flete, $1.000.000 por toda la labor de transporte, el resto del dinero lo deposité en mi cuenta, esto para pagar los gastos en los que yo incurrí en materiales en el packing».

– Aquí lo que parece, es que ‘todos ganaron’ o recuperaron su dinero, menos la señora Inés Gómez, ¿cómo explica usted esa realidad?

– «No es así, yo no gané nada en este asunto, lo que hice con su plata fue pagar los materiales que ella me dijo que sí comprara, perdí un millón y medio de Mano de obra, eso lo perdí yo, ella perdió la totalidad de su plata, los once millones de pesos, aquí la única persona que ganó es Miguel Herrera».

Roberto González Short

diario@eltrabajo.cl

 

Demandante refuta declaraciones de Cabrera

Siendo cierto que esta entrevista no concuerda con las declaraciones de la afectada y siendo verdad también que la gran perdedora en esta situación es la propia demandante, Diario El Trabajo habló con la misma para conocer sus impresiones en relación al descargo del empresario.

Inés Gómez Chávez
Inés Gómez Chávez

«Señor José Cabrera, usted y sus hombres me robaron mi plata, devuélvanmela, ustedes se llevaron el camión huyendo a Santiago, fue como un asalto, me dejaron tirada llorando en un fundo, no seas tan caradura ni sinvergüenza, devuélvame mi dinero, yo hablo con papeles, Miguel Herrera nada me vendió, fue usted quien me engañó», comentó Inés Gómez.

 

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