PUTAENDO.- La tarde de este miércoles, en el tribunal mixto de Putaendo, se desarrolló la preparación del juicio oral en contra de Francisco Valenzuela Sanhueza, el ex sacerdote de la Parroquia San Antonio de Putaendo, diligencia judicial que se extendió por más de cuatro horas.
En la ocasión estuvieron presentes el abogado defensor particular del ex Cura Pancho, Julio Álvarez Silva, además del fiscal jefe Osvaldo Cerda, y el abogado querellante José Villagrán, quien representa a una de las víctimas del bullado caso.
La audiencia fue dirigida por la Magistrada Rocío Oscariz Collarte, quien comenzó haciendo una narración de los hechos de este largo proceso iniciado hace más de un año, señalando en parte de su exposición que Valenzuela se encuentra imputado por los delitos de violación consumada y reiterada en contra de menores de catorce años, abuso sexual consumado y reiterado en menores de catorce años, abuso sexual en mayor de catorce años pero menor de dieciocho años y estupro consumado, todos estos delitos sindicados como autor.
La magistrada indicó que como atenuante, el ex sacerdote Francisco Valenzuela mantiene una irreprochable conducta anterior, agregando que como agravante se encuentra el hecho que los delitos pudiesen haber sido consumados en un lugar destinado para el culto, lo que se encuentra consignado como agravante en la ley. Estos antecedentes se fueron leyendo por parte de la magistrada, de acuerdo a la acusación que realizó el ministerio público, el que está solicitando dos penas de diez años y un día, cada una de presidio mayor en su grado medio, además de una condena de cinco años y un día, y una última de tres años y un día, también de presidio mayor en su grado medio.
El tribunal llamó a conciliación tanto a la defensoría como al abogado particular querellante por la indemnización presentada por el abogado particular querellante de treinta millones de pesos, no habiendo acuerdo, pues la defensa de Valenzuela se negó rotundamente a cualquier acuerdo, pues indicó que esta indemnización no correspondía ser pagada.
El abogado Julio Álvarez Silva, al realizar parte de su defensoría, dijo que rechazaban toda la acusación presentada por la fiscalía, pues su defendido no tiene ninguna responsabilidad en los hechos, agregando que se reserva la teoría de su defensa, la que será presentada formalmente en el juicio oral, para posteriormente presentar el nombre de treinta y cinco testigos, que según el abogado defensor, debieran ser considerados en el próximo juicio oral, agregando que estos testigos son miembros activos de la iglesia, y que su testimonio es fundamental para la defensa.
El abogado Álvarez también presentó sus pruebas periciales, solicitando al tribunal que se acoja el informe denominado “Metapericia” realizado por una perito particular contratada por la defensa, que echaría por tierra los informes emitidos por otros peritos del Cavas (Centro de Atención a Víctimas de Abusos Sexuales). Presentó además un informe de la PDI donde un perito en sonido y audiovisual también echa por tierra la prueba de la supuesta foto del pene del ex sacerdote, la que habría sido enviada vía celular, además de un informe químico realizado a un peritaje de ADN, todas pruebas que pidió ser incluidas en el próximo juicio oral.
El abogado defensor pidió excluir algunos testigos de la fiscalía, por considerarlos impertinentes, entre ellos, un seminarista de nombre Saúl, el que la defensa se negaba a que fuera acogido como testigo de la fiscalía, al igual que el testimonio del ex Obispo de San Felipe Manuel Camilo Vial Risopatrón, por considerar que su testimonio corresponde a hechos ocurridos hace muchos años, los cuales estarían preescritos y que no dicen relación con la actual investigación, excluyendo también las pruebas periciales, solicitando al tribunal que los peritos que realizaron las distintas pericias no fueran considerados como testigos, por no haberse acreditado como corresponde según la ley su idoneidad profesional. El abogado agregó que un hecho grave es un peritaje realizado por el perito que habría emitido dos informes, ambos con fecha siete de septiembre del 2010, idénticamente iguales, donde en uno indicaba que los hechos ocurrieron hace tres años, y en el otro, hace tres días, señalando que este perito adulteró y mintió en su informe, por lo que consideró que este informe médico legista era totalmente falso, para finalmente rechazar la prueba documental de las declaraciones de las supuestas víctimas.
El Fiscal Osvaldo Cerda rechazó todas las exclusiones presentadas por la defensoría, alegando que Francisco Valenzuela, en su calidad de ex sacerdote, “escapaba a la regla general de los sacerdotes chilenos”, agregando que el testimonio del ex obispo Manuel Camilo Vial era fundamental para demostrar en el juicio oral la conducta sostenida en el tiempo del imputado, y que lo vincularían con un caso de aborto ocurrido en la ciudad de San Felipe, donde supuestamente Valenzuela habría abusado también de una menor de edad. El fiscal también adelantó que prestará testimonio en el juicio oral, otra de las víctimas del Cura Pancho de la ciudad de Talca, que también habría sido abusada por el ex sacerdote.
En un breve acuerdo, las partes coincidieron en que a Francisco Valenzuela Sanhueza se le reconozca su calidad de sacerdote ordenado entre el doce de marzo de 1988 y el dos de junio de este año, cuando voluntariamente habría pedido su desvinculación de la iglesia católica.
El abogado querellante, José Villagrán, indicó que le parecía excesivo la cantidad de testigos de la defensoría, pues éstos solo se limitarían a decir que el ex sacerdote era una buena persona, agregando que ellos presentarán testigos que hablarán sobre los hechos que la fiscalía está indagando, interviniendo nuevamente el fiscal Cerda para aclarar que no hubo falsificación en el mencionado peritaje y que solo hubo una equivocación, y de ahí la importancia en el testimonio del citado profesional.
La magistrada ordenó un receso de una hora para poder analizar y resolver las presentaciones, tanto de la defensa, el ministerio público y la parte querellante, para luego de este receso, rechazar la solicitud de la defensa, en cuanto a la exclusión de algunos testigos, y rechazar la solicitud de la defensa en cuanto a los peritos, acogiendo la solicitud de validar como testigo a quien realizó la denominada «Metapericia» que la defensoría pidió ser incluida, lo que generó que el abogado defensor pidiera en el acto la nulidad a la resolución de la magistrada, cuya solicitud fue también rechazada al instante por la magistrada.
Finalmente el abogado defensor solo presentará quince testigos de los treinta y cinco que en un principio había solicitado.
Después de analizado lo relacionado con la preparación del juicio oral, por acuerdo de las partes, la resolución del auto de apertura del juicio oral será notificada vía correo electrónico, tanto a la defensoría, la fiscalía y el abogado querellante.
Para terminar la larga jornada vivida en el tribunal de Putaendo, el abogado defensor solicitó revocar la prisión preventiva del ex sacerdote, pidiendo arresto domiciliario total, por considerar que la investigación está agotada, que el informe ginecológico fue adulterado en cuanto a la fecha, por lo que solicitó esta medida, la que fue rechazada por el ministerio público, quien hizo prevalecer que ya en varias ocasiones el mismo tribunal había rechazado la libertad del ex Sacerdote Valenzuela, resolviendo finalmente la magistrada que al no presentar la defensa antecedentes concretos, y tomando en cuenta la gravedad de los delitos por los cuales Valenzuela está imputado, éste debiera mantenerse en prisión preventiva hasta que comience el denominado juicio oral.
El Fiscal Osvaldo Cerda, después de la extenuante jornada, indicó a nuestro medio que se encontraba satisfecho con la resolución del tribunal putaendino, agregando que ésta era la última audiencia que se realiza en el tribunal mixto de Putaendo, y que eventualmente el juicio oral en contra del ex Cura Pancho podría comenzar en el mes de diciembre en la ciudad de San Felipe.
Patricio Gallardo M.
por que no creer que ellos son capaces de cagarle la vida a una persona inocente,por eso la pena maxima no tengo piedad con esos animales por que cuando ellas decian NO el gozaba AHORA NO MAS LIBERTAD.solo DIOS lo puede perdonar uno no
Sr Fiscal: Cuando se va a enjuiciar a los encubridores y proxenetas?
creo que solo él y las personas involucradas saben la verdad de estos hechos, lo que si sé es que mi pueblo a sufrido mucho mucho por este tema, todos vimos todos creímos y todos fuimos testigos también de muchas cosas, para nadie fue un secreto que Valenzuela tenia relación amorosa con una mujer…(lo que no está permitido en la Iglesia catolica) y ninguno de nosotros dijo ni hizo nada….entonces…todos somos responsables de permitir que pase lo indebido…en lo personal un mea culpa, quizás si hubiésemos denunciado esa relación, los hechos relatados en esta noticia se habrían evitado y nadie estaría sufriendo, en especial estas niñas.
Pienso que la Sra.Juez,o el fiscal no debiera permitir que esas personas que trabajan en la parroquìa,participen como testigos en el juicio,ellos lo encubrieron, eran sus aliados,tambien deberìan ser juzgados.
En cuanto al Obispo Camilo Vìal,èl debe haber sabido que èste degenerado ya se habìa mandado una de las suyas donde estaba antes,y lo acepto,del actual Obispo mejor ni hablar,es el actual Pilatos, se lava las manos y continua, se supone que èl como autoridad de la Iglesìa en la zona debio sacar a todos los complices del ex-cura de la parroquia.Una buena limpieza incluso atraerìa màs feligreses.
Estoy de acuerdo con el comentario de Profesional en que todos somos en parte culpables por no haber actuado a tiempo. Que nos sirva de leccion, ya que quienes no aprendemos de la historia estamos condenados a repetirla.
Vale esto tambien para jueces, politicos y otros funcionarios corruptos