PUTAENDO.- La tarde de este miércoles en los hermosos parajes que entregan los cerros ubicados en el sector El Rungue de la comuna de Putaendo, fueron liberados los cinco cóndores que resultaron intoxicados al comer animales envenenados en Tabolango.
Recordemos que cuatro de ellos fueron rescatados por lugareños en Tabolango y una quinta ave, en similares condiciones fue encontrada en la comuna de Petorca, luego de permaneció en la Clínica Veterinaria de la Universidad Santo Tomás y posteriormente en un centro de rehabilitación que gestionó el Servicio Agrícola y Ganadero, fueron devueltas a su hábitat la tarde de este miércoles.
A este lugar llegaron el Seremi de Agricultura Ricardo Astorga, la Seremi de Medio Ambiente Tania Bertoglio la Directora del SAG V Región Francisca Herrera; el Gobernador Eduardo León; el Jefe Provincial del SAG, Alberto Cruz, el Médico veterinario Luis Vergara y también estuvo presente Carlos Muñoz, quien junto a sus hijos encontraron a los primeros cóndores en Tabolango.
Varios vecinos también llegaron al lugar, al igual que un grupo de estudiantes del Colegio Cervantino, que quisieron estar presentes en este importante momento, cuando los cóndores emprendieron vuelo ante el aplauso y emoción de todos quienes presenciaron la escena.
Como dato anecdótico, el cóndor que le correspondió liberar al Gobernador Eduardo León, se quedó hasta el final y luego de mirar detenidamente a la autoridad provincial, decidió desplegar sus alas y volar al encuentro de las otras cuatro aves.
El Gobernador Eduardo León destacó el trabajo del Servicio Agrícola y Ganadero y agradeció públicamente al médico Veterinario Luis Vergara de la Clínica Veterinaria Alcántara de San Felipe, e indicó que lo importante es que los cóndores fueron salvados, por lo que hizo un llamado a los vecinos para que tengan más cuidado sobre el manejo de pesticidas.
La autoridad de gobierno sostuvo que se continúa con las diligencias tendientes a dar con quienes accidental o intencionalmente envenenaron animales con pesticidas que posteriormente fueron ingeridos por los cóndores.
Patricio Gallardo M.