LOS ANDES.– Molestia existe entre las familias afectadas por el gigantesco incendio que a mediados de diciembre consumió por completo sus viviendas, luego que la empresa Chilquinta les exigiera un cobro para reponer el empalme de luz a sus domicilios, mismo que actualmente se encuentran en fase de reconstrucción.
Susana Astorga, una de las afectadas, dijo que al concurrir a la empresa a solicitar el empalme le dijeron que esa instalación tenía un valor de entre $80.000 y $120.000 para cada una de las viviendas, pero previo a ello debían contar con el informe de un técnico especializado que garantizara que las conexiones eléctricas al interior de las nuevas propiedades estuvieran dentro de la norma.
La afectada señaló que lamentablemente ellos quedaron con lo puesto y por ende no cuentan con el dinero para costear el empalme, ante lo cual la empresa lo único que ofreció fue el pago a través de pequeñas cuotas.
Susana Astorga se lamentó justamente en estos casos es que las empresas monopólicas como Chilquinta abusen de las desgracia de sus clientes, pues ellos recién y gracias a la solidaridad de muchas personas están volviendo a levantar sus casas.
En tal sentido pidió la intervención de alguna autoridad comunal, de la gobernación o parlamentario de la zona, para que los ayude con esta situación que están viviendo, ya que además están necesitando cemento para continuar con las obras de sus futuras casas e incluso deben cocinar con leña por no tener cocinas a gas.