Satisfecho porque cumplió su objetivo de conseguir una medalla en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, se encuentra el tenista sanfelipeño Guillermo Rivera, que espera volver al circuito de la ATP la semana entrante.
Rivera Aránguiz tenía previsto participar esta semana en el Futuro de Concepción, pero eso no fue posible debido a que pudo regresar a Chile el lunes cerca del mediodía, a lo que se sumó una serie de incomodidades en el viaje de regreso, ya que durante el vuelo hubo muchas turbulencias por lo que prácticamente no pudo dormir.
Pero el viaje de retorno no solo deparaba ese tipo de contratiempos, debido a que una vez en Chile, el «Guille» se encontró con la desagradable sorpresa de que parte de su equipaje (venía casi toda su ropa deportiva) al parecer se extravió, lo que sería un duro golpe porque esa indumentaria tiene un alto valor económico.
En relación al partido final del dobles mixtos, en el cual la dupla Rivera – Koch fue derrotada por una pareja mexicana (González – De la Peña), la raqueta aconcagüina explicó a su entorno que la derrota pasó básicamente porque el mexicano (es uno de los mejores del mundo en dobles), de manera muy inteligente se encargó se amedrentar a Koch enviándole un pelotazo al cuerpo, lo que trajo como consecuencia que la dupla de Rivera no volvió a jugar cerca de la malla.
Pero en la derrota no solo fue factor eso, porque el aconcagüino reconoció que no jugó un buen partido, además que el azteca González se iba inmediatamente sobre la malla y con su enorme porte impedía una buena visión de la cancha por parte de los chilenos, además que a Rivera le gustan los ralis (peloteos) largos y el mexicano era saque y volea.
El desafío más próximo de Guillermo Rivera será el Challenger de Medellín, en Colombia, aunque puede haber novedades de última hora porque el sanfelipeño sigue arrastrando algunas dolencias físicas que podrían impedir su participación en el torneo colombiano.
En tanto, en la intimidad de la familia y los amigos más cercanos a Guillermo Rivera, se preguntan si las autoridades sanfelipeñas se habrán dado por enteradas de que un hijo de esta tierra consiguió para Chile y la ciudad una histórica medalla Panamericana. Eso en todo caso es una incógnita, y si lo saben ojala las autoridades tengan claro que este deportista no necesita homenajes ni galvanos (tiene de sobra), si no recursos económicos para poder proyectar su carrera.
Es de seguro que van a saber que es Sanfelipeño a través del diario El Trabajo, porque las autoridades sólo saben que existe el futbol en Chile.
Un gran abrazo a este muchacho que demuestra como muchos deportistas chilenos sólo tienen el apoyo moral de quienes los conocen y a veces el apoyo de algunos empresarios, pero del gobierno ????¿¿¿¿¿