Regresan a la comuna Bomberos de Putaendo luego de servir en el norte

Desolador era el paisaje que observaban los voluntarios de Bomberos que fueron llamados a colaborar en el norte del país.

PUTAENDO.– Al mediodía del lunes recién pasado regresaron a la comuna los seis operadores de rescate minero que pasaron una semana en la ciudad de Diego de Almagro en la Tercera Región.
Recordemos que estos operadores de rescate junto a efectivos del Cuerpo de Bomberos de LlayLlay y Cabildo fueron convocados por el Seremi de Minería para prestar apoyo en labores de búsqueda y rescate en la tercera región del país.
El día martes cuando arribaron al Puesto de Comando de Incidente (P.C.I.) en la ciudad de Chañaral, fueron recibidos por Raúl Bustos, Secretario Nacional de Bomberos de Chile y coordinador de los equipos Usar de Bomberos. En esa reunión la delegación de bomberos de la Quinta Región interior, fueron destinados a una misión específica en la ciudad de Diego de Almagro.
Diario El Trabajo conversó con el 2º Comandante del Cuerpo de Bomberos de Putaendo, Francisco Correa Díaz, quien nos contó detalles del trabajo realizado en el norte del país.
– ¿Cuál fue esa misión específica que se les encomendó?
– Efectivamente el día martes 31 de marzo, cuando arribamos a la ciudad de Chañaral, sostuvimos una reunión con Sr. Raúl Bustos, quien era el Comandante de Incidente en la Región. Luego de recibirnos y agradecer nuestra presencia en el lugar nos solicitó que siguiéramos el viaje hasta la ciudad de Diego de Almagro, para prestar apoyo en la búsqueda del bombero de esa ciudad que había desaparecido durante el aluvión. La misión específica que se nos encomendó fue rastrear el rio Salado desde Diego de Almagro hasta la localidad del Salado distante aproximadamente 30 Km.

Al medio día del lunes pasado volvieron a la zona los 6 seis operadores de rescate minero que trabajaban como voluntarios.

– ¿Cómo fue ese trabajo de rastreo?
– La verdad es que fue un trabajo arduo y agotador. Por norma un equipo de rescate no debe trabajar más de 6 o 7 horas continuas, pese a ello y con el objetivo de cumplir lo encomendado, nosotros iniciábamos las labores a las 08:00 horas y regresábamos a nuestro campamento a eso de las 18:00 horas.
Si bien 30 Km. no es una gran distancia, teníamos la complicación de que por el río aún corría algo de agua, había lugares que parecían ser terreno firme, pero nos dábamos cuenta que el lodo aún estaba blando y muchas veces teníamos el barro hasta más arriba de los tobillos, en algunas ocasiones nos hundíamos hasta las rodillas y, entenderán que un bototo pesa en doble o el triple que en condiciones normales.
Sumado a lo anterior, el río en muchos puntos llegaba a tener un ancho por sobre los 700 metros por lo cual debíamos zigzaguear para poder cubrir toda su extensión.
Con todo logramos la tarea que nos habían encomendado y logramos cubrir todo el río salado con un exhaustivo rastreo, podemos decir que no dejamos ni un metro de río sin verificar y buscar.
– ¿Además del Rastreo que otras labores debieron realizar?
– Bueno durante dos días debimos realizar labores de búsqueda y rescate Urbano, vale decir, verificar en las calles, pasajes y casas que se encontraban con el barro hasta más arriba de las ventanas. También trabajamos con maquinaria pesada para poder hacer remoción de escombros, claro que esta remoción se hace muy lenta y con mucha precaución, ya que todos nuestros trabajos tendían a encontrar algún vestigio del bombero que estábamos buscando.
– Esta asistencia del Cuerpo de Bomberos al Norte del País, ¿Nace por iniciativa propia?
– No, muy por el contrario, nosotros fuimos convocados a ayudar en las labores de búsqueda y rescate en el norte del país después de una coordinación entre la Seremi de minería de la Región de Valparaíso junto a las autoridades regionales de Bomberos, en donde también estuvieron involucradas las gobernaciones y por supuesto el puesto de Comando de Incidente en la Región de Atacama. De hecho, cuando nosotros estábamos ya en camino hacia el norte, recibimos dos o tres llamados telefónicos del Comandante del Incidente, don Raúl Bustos, preguntando en cuánto tiempo arribábamos a Chañaral y él nos estaba esperando el día martes cuando llegamos al lugar.
Permíteme que aquí sea muy claro, cuando Bomberos de Putaendo sale a una emergencia fuera de la jurisdicción es porque somos solicitados para ello, no nos auto convocamos ya que si lo hiciéramos creamos más problemas que beneficios. Cuando tú pides ayuda a otros Cuerpos de Bomberos hay todo un tema logístico detrás. Bomberos de Putaendo es muy disciplinado en cuanto a esto y si no nos convocan, no asistimos aunque sean muchas las ganas de ayudar.
– Finalmente, ¿La carga emocional de enfrentar este tipo de emergencias, como se vive?
– Es duro, estas en un lugar extraño, lejos de la familia, a cientos de kilómetros de distancia, en una ciudad devastada por la tragedia, compartiendo con personas que están sufriendo, pero que aun así te agradecen el hecho que estés ahí tratando de ayudar, buscando a un joven camarada desaparecido, con un padre que cifra sus esperanzas en ti para mitigar su dolor encontrando el cuerpo de su hijo, la verdad que es muy duro. Y por mucho entrenamiento que uno tenga, por muchos cursos que hayas realizado en donde te dicen que debes tratar de abstraerte de toda esa tragedia para trabajar bien, es muy difícil. Un momento especialmente conmovedor para todos fue cuando una vez cumplida nuestra misión y prepararnos para el retorno, llegó a nuestro campamento el padre del Bombero desaparecido, quien es funcionario de Carabineros de Chile. Cuando un padre lleno de angustia llega a despedirte y darte las gracias y te dice “muchas gracias, no encontramos a Álvaro pero ustedes dieron su mejor esfuerzo, y a nombre de mi familia les agradezco de corazón su trabajo”, créeme que eso quiebra a cualquiera.
– ¿Qué se viene para el Cuerpo de Bomberos a partir de esta situación?
– Tenemos algunos desafíos que enfrentar, en especial en materia de capacitación. Como ustedes saben, la especialidad de rescate se encuentra principalmente en la Primera Compañía, en donde está el material mayor de rescate y por supuesto todo el material técnico conseguido a través de distintos proyectos. Un desafío inmediato para la Primera Compañía es que todos sus bomberos obtengan la especialidad de Rescate Urbano, para luego tratar de conseguir más cupos para el curso de rescate minero y tratar de realizar alguna capacitación en rescate agreste, la idea principal es dejar a todos los bombeos de la Primera Compañía nivelados en materia de rescate.
Patricio Gallardo M.