Mil ochocientos minutos por la educación estuvieron corriendo ininterrumpidamente los estudiantes secundarios de la comuna de San Felipe, alrededor de la plaza de Armas en estos últimos dos días.
Esta actividad fue parte de la iniciativa que llevaron adelante los secundarios y universitarios en Santiago, por alrededor del palacio de La Moneda, el pasado 27 de agosto.
«En esa oportunidad se corrieron más de 32 mil kilómetros, participaron más de 35 mil personas que corrieron con postas, se corrieron 1800 horas ininterrumpidas, día y noche, la bandera no podía parar», señaló Diego Guerrero, coordinador de la corrida y miembro de la comisión viajera que además componen Constanza Pino, Ignacia Benito, Carlos Sarias y Daniela Muñoz.
No conformes con esa actividad, y tratando de que el movimiento estudiantil siguiera vigente entre la comunidad, los coordinadores comenzaron otra iniciativa, esta vez iban a correr por Chile.
«Después de eso comenzamos a conversar entre nosotros y pensar de qué forma podemos seguir el movimiento, algunos dijeron y si seguimos corriendo alrededor de La Moneda, y comenzamos a gestar el proyecto de 1800 horas por Chile», comentó Diego.
Y fue así como iniciaron el recorrido en Porvenir, el 21 de septiembre pasado. Con 7 grados bajo cero, la temperatura no fue un impedimento para cumplir la meta: corrieron las 30 horas y eso les dio el impulso para comenzar a subir por Chile, llegar esta semana a San Felipe y recorrer en total alrededor de 60 localidades de sur a norte, siendo esta comuna el punto 41 que visitan.
Y la meta la volvieron a cumplir en esta comuna, los estudiantes secundarios corrieron las 30 horas y terminaron a eso de las 13 horas de este miércoles.
Luego de eso se dirigieron a la comuna de Los Andes, comuna a la que pensaban dirigirse corriendo por la carretera nueva, ciudad donde se iba a realizar la misma actividad, también con la participación principalmente de los secundarios.
«El movimiento estudiantil, en este momento en Chile, está en un 70% siendo gestionado por estudiantes secundarios, no por estudiantes universitarios, incluso desmentimos las cosas que ha dicho Confech, nosotros no estamos luchando por nosotros mismos, también estamos luchando por ellos, pero parece que a muchos universitarios se les olvidó, porque dicen ésta no es mi lucha porque ya estoy endeudado, yo también estoy endeudado, estuve al borde de la depresión de sentirme tan endeudado y no tener nada concreto, es un tema súper fuerte».
Luego de Los Andes continúan más al norte, como una forma de luchar por la educación, porque según lo dijo Diego, «los estudiantes no nos damos por vencido».