Escuchas telefónicas permitieron condenar a peligrosos narcos de Curimón

Los hermanos Accel Rafael y Felipe Sebastián Sánchez Toro fueron condenados a cumplir una pena de 10 años de cárcel por el delito de tráfico de drogas.

Los hermanos Accel Rafael y Felipe Sebastián Sánchez Toro eran temidos en la localidad de Curimón por su conocido currículum de traficantes de drogas. Sin embargo gracias a las pericias de OS7 de Carabineros de San Felipe, la Fiscalía logró acusarlos en juicio oral obteniendo penas privativas de libertad.
Por el delito de tráfico de drogas fueron condenados los hermanos Accel Rafael y Felipe Sebastián Sánchez Toro, luego de la realización de un juicio oral que los condenó a la pena de 10 años y un día de cárcel efectiva más el pago de 40 unidades tributarias mensuales, de acuerdo al fallo del Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe.
En el caso que se mantuvo en manos del Fiscal Julio Palacios Bobadilla, se acusó a los hermanos actualmente condenados, tras las importantes escuchas telefónicas que los efectivos de OS7 de Carabineros de San Felipe investigaron, tras la interceptación de los aparatos móviles de estos peligrosos narcotraficantes.
Según las pericias policiales, ambos sujetos eran conocidos por reclutar jóvenes menores y mayores de edad para la distribución de drogas en la localidad de Curimón, lugar donde se realizaban importantes transacciones de drogas. Con el correr del tiempo, Carabineros fue investigando hasta concluir en reiteradas oportunidades en episodios de microtráfico de estupefacientes, por los que ya fueron enjuiciados.

12 KILOS DE DROGAS
Sin embargo, estos hermanos temidos por la comunidad, seguían siendo vigilados por los efectivos de OS7 de Carabineros, realizando escuchas telefónicas durante cuatro días que dejaron como evidencia una importante compra de doce kilos de pasta base de cocaína que sería adquirida desde la ciudad de Calama para ser distribuida en la provincia de San Felipe.
Estos ilícitos permitirían las constantes regalías en dinero en efectivo que algunos ‘soldados’ ganaban tras efectuar ventas de sustancias en dicha localidad, donde resultaban involucrados hombres y mujeres de todas las edades, quienes eran cómplices de estos actos.
La condena se enmarca en los sucesos ocurridos en el mes de agosto del año 2013 cuando los hermanos Sánchez Toro concretaron la transacción de drogas desde el norte del país vía telefónica. El traslado de la droga lo realizó un grupo de cinco ‘soldados’ quienes fueron encomendados viajar desde la provincia de San Felipe hasta la ciudad de Calama, lugar donde recibieron los 12 kilos de pasta base en paquetes cubiertos con pasta de dientes en el interior de una bolsa hermética, con la finalidad de evadir el control y fiscalización de canes detectores de drogas.
Luego de adquirir estas sustancias en maletas de viaje y de efectuar el pago de una importante suma de dinero, los cinco ‘soldados’ se dividieron en dos buses desde Calama, hasta descender en el peaje Las Vegas de Llay Llay donde fueron interceptados por Carabineros, incautando los doce kilos de pasta base equivalentes a 60 mil dosis.

A LA CÁRCEL
El Ministerio Público llevó a juicio a estos cinco imputados, quienes luego de permanecer en prisión preventiva, fueron condenados a penas efectivas de cárcel por el delito de tráfico de drogas.
En tanto, esta semana concluyó el juicio en contra de los líderes del tráfico de drogas, Accel Rafael y Felipe Sebastián Sánchez Toro, a quienes se le atribuyó su participación gracias a las grabaciones de las conversaciones telefónicas que ejecutó el personal especializado de OS7 de Carabineros, pruebas que fueron concluyentes para el Tribunal en asignar una pena de crimen de 10 años por estos delitos.
El Fiscal Julio Palacios Bobadilla indicó a Diario El Trabajo que ambos sujetos mantienen condenas anteriores por delitos similares: «A través de las escuchas telefónicas se comprobó que los hermanos Sánchez Toro encargaron estas drogas, entonces se reunieron todos estos antecedentes para acreditar que estas personas también estaban involucradas, se formalizó y finalmente se hizo el juicio oral, siendo condenados. Por cuatro días la Policía interceptó los teléfonos celulares de los hermanos Sánchez Toro, donde quedaron en evidencia las transacciones ilícitas que cometieron estos sujetos con traficantes de la zona norte del país».

‘ABOGADA DE LOS NARCOS’
Durante las audiencias de juicio oral, los hermanos Sánchez Toro eran defendidos por la autodenominada ‘Abogada de los Narcos’ y popular farandulera Helhue Sukni, quien pretendía destronar la tesis de la Fiscalía tras las pruebas que situaban a los acusados como cabecillas de este importante ingreso de drogas a la provincia de San Felipe.
Sin embargo el Fiscal Palacios recalcó que «en este caso ellos se contactaron con unas personas en Calama y éstos reclutaban a otros jóvenes de esta zona para que hicieran el traslado de la droga escondida en maletas, abordando un bus. A través de las llamadas telefónicas se supo que estas personas iban a transportar la droga, donde se hizo el seguimiento desde el norte del país hasta llegar al peaje Las Vegas de Llay LLay», cerró el persecutor.
Palacios se mostró conforme con la condena impuesta por el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe dando término a esta minuciosa investigación a cargo de Carabineros de OS7 de San Felipe, no obstante la Defensoría de los actuales condenados podría recurrir de nulidad durante los próximos días ante la Corte de Apelaciones.
Pablo Salinas Saldías

Los doce kilos de pasta base fueron incautados por los efectivos de OS7 de Carabineros de San Felipe en el peaje Las Vegas de Llay Llay.

Fiscal Julio Palacios Bobadilla.