- Brutal caso de violación ocurrido en la comuna de Santa María el año 2008 logró concluirse ayer miércoles, cuando el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe sentenció al condenado a pagar su delito tras las rejas.
La justicia tarda pero llega, así lo refiere este popular refrán que enmarca un brutal caso de violación a un niño de 12 años de edad, cometido en la comuna de Santa María el año 2008.
La Fiscalía jugó un importante rol en estos últimos días, al acusar a un sujeto de origen mapuche como autor de este hecho, quien el día de ayer miércoles fue sentenciado por el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe a una pena de 6 años de cárcel.
Más de siete años se mantuvo archivado este caso en las carpetas del Ministerio Público de San Felipe, debido a que el sentenciado Ricardo Erasmo Huachunao Cayuqueo se encontraba prófugo de la justicia. Sin embargo al cabo de tres meses se logró su captura en la región de la Araucanía, quedando en prisión preventiva para ser procesado judicialmente.
La víctima, que actualmente es un adolescente, relató ante los jueces las atrocidades a las que fue sometido cuando tenía 12 años, cuando un sujeto absolutamente desconocido para él, lo abordó en la vía pública fingiendo ser un psicólogo perteneciente a la Policía de Investigaciones, obligándolo que lo acompañara hasta una casa abandonada en la comuna de Santa María.
El testimonio refiere a que Ricardo Huachunao Cayuqueo engañó al niño como falso policía, y al encontrarse a solas en la vivienda, el criminal procedió a violarlo en dos oportunidades sin ningún tipo de remordimiento. La víctima aseguró en su crudo relato que intentó defenderse y golpeó los testículos de su atacante, logrando escapar hasta su domicilio.
De inmediato esta situación fue puesta en conocimiento de la abuela del menor que se encontraba a su cargo, a quien el niño detalló los crueles suplicios a los que fue sometido. De inmediato, unos tíos de la víctima salieron en búsqueda del violador en compañía de Carabineros, logrando su captura minutos más tarde.
Tras siete años de estos hechos, las pruebas presentadas por la Fiscal Daniela Quevedo Henríquez, se concentraron en demostrar ante el Tribunal Oral, que el sujeto es el autor ejecutor de este grave delito, por el cual finalmente fue condenado por la terna de jueces a cumplir una sentencia de 6 años de cárcel.
Ante la sentencia, la persecutora se mostró conforme con los resultados señalando que “se encontraba dentro del tramo que puede aplicar el Tribunal. Con las pruebas de la Fiscalía se logró acreditar la participación del sujeto por este hecho, lo que nos resulta importante”. La representante del Ministerio Público explicó que el condenado mantenía una irreprochable conducta anterior, razón por la cual se aplicó dentro del rango de la pena un grado mínimo.
Por su parte la Defensa mantiene un plazo de diez días para eventualmente presentar un recurso de nulidad de juicio ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso.
Pablo Salinas Saldías