Municipalidad de San Felipe reconoce urgencia en realizar un diagnóstico de especies arbóreas de alamedas

• Tras reunión con el conductor del taxi se determinará qué responsabilidad tiene el municipio y cómo debe responder ante el daño que sufrió el vehículo. A su vez, hoy sostendrá reunión con Chilquinta para coordinar plan de acción por los daños que el plátano oriental provocó en el cableado y alumbrado público.

Ante la riesgosa y particular situación que se vivió el martes pasado, cuando un añoso plátano oriental de la Alameda Yungay cayó sobre la parte trasera de un radiotaxi, afortunadamente sin víctimas que lamentar, la Municipalidad de San Felipe asumió que los árboles de las distintas alamedas deben ser sometidos a un diagnóstico que permita conocer qué especies ya cumplieron con su ciclo de vida y hoy se transforman en una amenaza para la población.
Jorge Jara Catalán, alcalde Subrogante de la ciudad de San Felipe, ratificó que el municipio tomará dos medidas respecto de esta situación. La primera de ellas, es que el profesional encargado del tema fue instruido para que en las próximas 72 horas elabore un informe respecto de la condición de este árbol en particular y de otros similares que están en las alamedas.
Respecto a esto Jara aseveró que “para todos es público y notorio que en las alamedas, particularmente Chacabuco y Yungay, pero también en otros puntos de la ciudad, existen árboles de avanzada edad y de grandes dimensiones y que probablemente tengan su período de vida útil vencido por la condición en que se encuentran…por lo que no cabe duda que habrá que intervenir algunas especies que tienen su ciclo de vida completamente vencido”, definió.
A su vez, el abogado adelantó que es de suma urgencia llevar a cabo un estudio más completo respecto de las especies arbóreas de la ciudad, por lo cual, proyectó que “realizaremos una licitación pública para contratar un servicio de información con profesionales capacitados, sin perjuicio que estamos pidiendo apoyo a Conaf en casos puntuales para de esa manera establecer un diagnóstico claro y categórico con el afán de prevenir hechos similares o de mayor riesgo para la comunidad”, enfatizó.
Sin embargo, el profesional asume que el problema no se acaba sólo cortando los árboles e hizo mención a las críticas que ha recibido la administración de Freire por la serie de especies arbóreas que se han cortado en el último tiempo, particularmente los álamos que amenazaban caída y riesgo para los vecinos de la población Yungay específicamente de calle Joaquín Oliva.
“Están los estudios técnicos y el informe del profesional del municipio y se tomó esa decisión, contra la opinión de algunos particulares. La Junta de Vecinos había pedido formalmente al concejo y al propio alcalde que se tomara esa decisión y de hecho hay muestras fidedignas de los cortes que quedaron en propiedad municipal, que los árboles estaban en condiciones inadecuadas desde el punto de vista de su naturaleza, así que ahí se tomó una medida de orden preventiva”, acusó el profesional.
En relación a la re arborización, Jara señaló que debe trabajarse en la elaboración de un proyecto más intenso y completo que requiere el apoyo de la comunidad, porque cada vez que se plantan especies arbóreas de ciertas características, al día siguiente se encuentran cortadas, rotas o simplemente se las roban, por tanto existe un problema cultural complejo que se debe abordar y que forma parte del problema.

RESPONSABILIDADES EN EL HECHO
Respecto de la responsabilidad que le cabe al municipio en este incidente que terminó con un radiotaxi completamente destruido y con alumbrado público y líneas telefónicas cortadas, Jara aseveró que “es un hecho fortuito, pero la Municipalidad como administradora de los bienes nacionales de uso público se hace responsable de reparar los daños que sean de pertinencia en esta situación”, puntualizó.
En cuanto al automóvil, Jara detalló que las responsabilidades están por determinarse ya que “a pesar de lo que se ha dicho en algunos medios y como alcalde subrogante hoy (ayer), no tengo certeza si el vehículo estaba en movimiento -entiendo que en el parte policial así se consignó-, o si estaba estacionado frente al lugar donde cayó el árbol. Eso genera inmediatamente una singularidad respecto del tema de las responsabilidades, por eso no es bueno aventurar juicios y es mejor conocer primero la versión de esta persona de primera fuente”, aclaró.
En este punto el personero aseguró que personal municipal citó al conductor del vehículo para conversar con él y conocer cuál es la condición y las características puntuales del hecho y de esta forma analizar los cursos de acción, puesto que “en el evento si hubiere alguna toma de responsabilidad del municipio tendríamos que celebrar una transacción extra judicial, hay un procedimiento que está considerado en la ley, pero esto en el evento que se establezca que hay una responsabilidad netamente municipal”, sentenció.
En caso que el móvil haya estado estacionado en el lugar, el asesor jurídico del municipio explicó que “ahí está prohibido estacionar vehículos, por eso queremos establecer aquello con el conductor del taxi y poder determinar con mayor claridad porque las versiones que tenemos son disimiles. La municipalidad tiene la obligación de asumir su responsabilidad en el evento que se establezca que así corresponde y hay normativas jurídicas que nos obligan a aquello, pero también con la misma claridad digo que cuando el municipio no se ve obligado a indemnizar por alguna razón de orden jurídico obviamente no puede hacerlo por muy buenas intenciones que el administrador, en este caso el alcalde Patricio Freire, tenga frente a un particular que haya sufrido algún perjuicio”, especificó.
Respecto de cómo se resolverá el tema del alumbrado público con Chilquinta Jara mencionó que ya estaba programada para hoy una reunión con el administrador local, con el fin de analizar el tema que le corresponde a la municipalidad en ese punto en particular.