Max Navas, presidente de la Asociación de Comercio y Turismo de Aconcagua, ACTA y propietario de Tienda La Cigüeña.Max Navas, presidente de la Asociación de Comercio y Turismo de Aconcagua, ACTA y propietario de Tienda La Cigüeña.
Max Navas, presidente de la Asociación de Comercio y Turismo de Aconcagua, ACTA y propietario de Tienda La Cigüeña.
Max Navas, presidente de la Asociación de Comercio y Turismo de Aconcagua, ACTA y propietario de Tienda La Cigüeña.
  • La madrugada del miércoles, el empresario sufrió un nuevo robo en uno de sus negocios y aseguró estar cansado de la inoperancia de las autoridades. Por su parte, el kiosco de Luis Zelaya fue desvalijado, sufriendo su décimo segundo atraco, sin que existan penas efectivas sobre los responsables.

Frustración, rabia, impotencia y desolación son sólo algunos de los sentimientos que embargan a un par de comerciantes sanfelipeños que han visto como el mundo del hampa se apropia no sólo de sus pertenencias y mercadería, sino que a la vez, se llevan en el botín, su seguridad y la poca confianza que les queda en las autoridades sanfelipeñas.
Es el caso del comerciante Luis Zelaya y del empresario Max Navas, quienes fueron víctimas de sendos robos en sus respectivos negocios en la madrugada de ayer miércoles.
En el caso de Zelaya el escenario es devastador, puesto que entre el domingo y ayer miércoles sufrió dos robos en su kiosco ubicado en calle Merced casi al llegar a Salinas. En primera instancia, la madrugada del lunes el negocio de este reconocido comerciante sanfelipeño, fue perforado en el techo, por donde un delincuente ingresó y sustrajo alrededor de 20 cartones de cigarrillos. Sin embargo, la pérdida no llegó hasta ahí y la madrugada del miércoles, ante la impávida reacción de Carabineros, el mismo delincuente, según presume Zelaya, rompió los candados del local con un napoleón y robó el resto de cigarrillos y otros productos, con una pérdida total cercana a los dos millones de pesos.
De acuerdo a lo narrado por Zelaya, el ilícito debe haberse producido cerca de las 4 de la mañana y según dijo se trata de un delincuente conocido y que ya tiene completamente identificado. “Nosotros los datos que tenemos ya se los hemos entregado a Carabineros y ahora va en ellos. Fui a investigaciones y ahí me dijeron que tenía que esperar hasta el viernes (mañana), que hablara con el Fiscal para que les entregaran la orden de investigar”, detalló.
En relación con el actuar de las policías y de la justicia, Zelaya dejó entrever una sensación de abandono, puesto que es la decimosegunda vez que le roban y ante esto se resignó aludiendo queque “ya no voy a recuperar nada, es muy tarde, es difícil que lo metan preso a este tipo, así que uno ya está pensando en hacer ley uno mismo porque el huevón (sic) se ríe de uno, anda por aquí suelto a la vista de todos, yo sé de quién se trata, hay una cámara que lo captó cuando iba arrancando con las bolsas”, narró.
El relato de este comerciante no termina ahí y con la voz quebrantada no pudo dejar de expresar la impotencia de ver la inoperancia de las autoridades ante la seguidilla de robos de los cuales ha sido víctima y que nunca han arrojado como resultado la detención definitiva de los hampones. “Me han abierto el kiosco como 12 veces y nunca se ha sabido nada, todo queda ahí en el archivo. Es difícil empezar de nuevo, de cero, me da pena que estos hueones (sic) siguen sueltos, estamos a media cuadra de la plaza, entonces no es posible. No le echo la culpa a la policía, yo creo que es la justicia, no hay mano dura. Los carabineros se los llevan y a la media hora andan por aquí dando vueltas”, describió en medio de sollozos.
De la tristeza de Zelaya, la historia delictual de los últimos días en San Felipe, se traslada a la rabia e Impotencia de Max Navas, presidente de la Asociación de Comercio y Turismo de Aconcagua, Acta, quien en la madrugada del miércoles sumara un sexto robo a su negocio, la popular tienda infantil La Cigüeña.
Según el relato de Navas, en momentos que se encontraba en la parte posterior del local cerca de la 1 de la mañana, escuchó ruidos que lo hicieron salir de inmediato hacia el área de ventas de la tienda, donde se encontró frente a frente con un lumpen, quien tras escalar por la reja de acceso a su local y romper el vidrio de la mampara de ingreso, sustrajo de la caja recaudadora un monto cercano a los 40 mil pesos.
“Realmente esto te hace darte cuenta que en San Felipe y en Chile ya no hay seguridad, esta es la sexta vez que me roban, me encontré cara a cara con el mismo ladrón que me ha robado anteriormente y que le ha robado a todo el comercio de San Felipe. El estado no está garantizando la seguridad, tú no puedes dormir, no puedes vivir, cómo es posible. Las autoridades deben ponerse los pantalones de una vez por todas”, recalcó el empresario.
En este mismo tono, Navas fue enfático en destacar que “hay una impunidad total, los tribunales no están haciendo su pega, los fiscales están dejando a los delincuentes libres, los parlamentarios también tienen que endurecer las leyes, las autoridades municipales deben contar con seguridad ciudadana, si la gente merece vivir tranquila, no hablo sólo por mí, es por toda la gente que se ve afectada y que estamos viendo que la delincuencia se tomó el país, esa es la verdad y el trabajo de las autoridades es darnos seguridad y no lo están haciendo”, enfatizó.
Respecto de cuáles son las medidas que tiene pensado tomar, Navas no dudó en analizar tomarse la justicia con sus propias mano si vuelve a sufrir un robo y dijo que “si seguimos con esto no va a quedar otra alternativa y la ciudadanía va a tener que armarse porque si las autoridades no son capaces de resguardar tu seguridad uno tiene que defender su trabajo y el esfuerzo de cada uno de los ciudadanos que nos estamos viendo afectados”, aseveró.
Paradójicamente la pérdida en dinero para Tienda La Cigüeña fue menor y el delincuente no alcanzó a llevarse productos, sin embargo su propietario señaló que los costos de reparación de rejas y mampara se acercan al millón de pesos.
Al mirar la mitad llena del vaso, en sendas historias se puede rescatar que las pérdidas sólo fueron económicas y materiales y los delincuentes no atentaron contra la integridad física de ambos comerciantes sanfelipeños. Sin embargo, al ponerse en los zapatos de Navas y Zelaya, la mitad vacía del vaso también toca a otros empresarios locales, de distintos rubros, que seguramente están sintiendo que hoy por hoy viven en medio del ‘lejano oeste’, abandonados a las pretensiones del hampa y resignándose a levantar una y otra vez sus negocios, mientras los antisociales se ríen en la cara de la ley y las autoridades.

 

12 comentarios en «Max Navas, dueño de tienda La Cigüeña: “Si seguimos así, la ciudadanía va a tener que armarse para defender el esfuerzo de cada uno”»

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