- El afectado aceptó el depósito con documento por la suma de $7.500.000 entregando su vehículo para descubrir dos días después que todo se trató de una estafa, sin lograr recuperar su camioneta.
El Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe condenó por el delito de estafa a una mujer identificada como Melanie Ghislaine Lozano Olivos, quien tras un juicio se comprobó su participación, junto a un tercero, de una estafa al adquirir una camioneta ofertada por un sanfelipeño que fue engañado con el depósito de un cheque robado por la suma de $7.500.000 el año 2014.
El fiscal a cargo del caso, Eduardo Fajardo De La Cuba, afirmó a Diario El Trabajo que se logró establecer la participación de la imputada domiciliada en la Región Metropolitana, contactando por intermedio de una tercera persona a la víctima que vendía su camioneta en el portal de internet ‘Chile Autos’, coordinando la compra del móvil en la comuna de San Felipe.
El persecutor indicó que la sentenciada concurrió hasta esta comuna, junto con un supuesto mecánico que sería un tío, para revisar las condiciones del móvil que mantenía la víctima, indicando su satisfacción por las condiciones mecánicas en que se encontraba la camioneta para generar la compra venta.
“Por mandato de la imputada a un tercero le paga con un documento a la cuenta del Banco Estado a la víctima, y cuando revisa el saldo le aparece un depósito por $7.500.000 y concurre al Registro Civil a hacer la transferencia y la mujer se lleva el vehículo. La víctima consulta su saldo retenido hasta dos días, transcurrido este plazo, el banco le indica que le depositaron con un cheque robado y se hace la denuncia por estafa”, indicó el Fiscal Fajardo.
La Fiscalía presentó durante el juicio el testimonio del afectado, además estableciéndose la falsedad del documento a través de pericias, confirmándose que el cheque había sido robado tiempo atrás, junto con las declaraciones de testigos de los hechos y funcionarios de la Policía de Investigaciones que adoptaron el procedimiento. El representante del Ministerio Público de San Felipe indicó que la imputada reconoció parcialmente su responsabilidad.
Fajardo añadió, que pese a que se perseguía una pena de tres años de presidio, el Tribunal aplicó dentro del rango que establece la ley que castiga este delito desde los 541 días, sentenciando a la enjuiciada a dos años de presidio, estableciendo la existencia del delito y la participación de la imputada.
“Se logró configurar la estafa, el vehículo no logró ser recuperado por ende es un hecho consumado. El Tribunal condenó a dos años de presidio menor en su grado medio, por su irreprochable conducta anterior se le concedió beneficio con la remisión condicional de la pena”.
Pablo Salinas Saldías
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