- Sólo existe una estación en Catemu: Seremi de Medioambiente aseguró que gestionará una unidad de medición ‘intermitente’, que al menos durante el invierno permita conocer si en la zona existe saturación por material particulado.
Con la llegada del invierno, los termómetros del Valle Aconcagua suelen descender hasta temperaturas bajo cero: madrugadas gélidas, días fríos y tardes igualmente heladas, han desencadenado durante los últimos años la proliferación de los sistemas de calefacción a leña y con ello el empeoramiento de la calidad del aire que se respira.
Eso al menos se aprecia a simple vista, ¿pero en realidad sabemos a ciencia cierta qué tipo de aire estamos respirando? o ¿cuáles son las acciones a realizar para mermar la contaminación durante el invierno que se avecina? Lamentablemente en la provincia de San Felipe sólo Catemu cuenta con una estación de monitoreo permanente para medir de la calidad del aire, mientras que los habitantes de San Felipe y otras comunas -sin parámetros objetivos- deben soportar no sólo el uso indiscriminado de estos sistemas de calefacción, sino que además la quema de pastizales y la contaminación que generan las distintas industrias de la zona.
Así lo confirmó Tania Bertoglio, Seremi de Medioambiente de la Región de Valparaíso, quien aseguró que la inexistencia de una unidad especializada en medición de la calidad del aire, impide conocer si en San Felipe y sus alrededores hay ‘algún tipo de saturación por material particulado’.
«Lamentablemente como aquí no existe reporte de una estación de monitoreo, es muy difícil reportarla como una zona saturada o elaborar planes de prevención, porque para esto debemos tener datos estadísticos por más de cinco años», explicó Bertoglio, agregando que -de todas formas – el cuidado del aire es una responsabilidad conjunta, en donde las Municipalidades también deben tomar cartas en el asunto.
«Existe mucha quema agrícola, la cual, cuando no está autorizada por Conaf (Corporación Nacional Forestal), debe ser fiscalizada, entonces aquí también debe tomar un rol importante del municipio, para que solicite a Carabineros que impida ese tipo de quemas», sostuvo la personera de Gobierno, argumentando que «hay prácticas de los propios habitantes, a las que deben estar asociadas ordenanzas municipales que restrinjan ese uso», afirmó.
Aun así, la Seremi de Medioambiente de Valparaíso reconoció que para establecer planes hay que declarar zonas saturadas, por lo tanto «desde el Ministerio de Medioambiente nos falta un compromiso no sólo de hacer informes para saber cómo está la calidad del aire, sino que, hacer un poco lo que estamos haciendo en Quintero, Con-Con y Puchuncaví, en donde tenemos una estación móvil que está recorriendo estos lugares, está reevaluando si las estaciones de esos puntos deben estar ahí, readecuarse o colocar otras», añadió.
En virtud de que a futuro exista un plan de descontaminación para Aconcagua, Bertoglio se comprometió a gestionar una estación de monitoreo intermitente que permita obtener ciertas referencias de la calidad del aire y así guiar las acciones que deben realizar las autoridades locales.
«Yo voy a averiguar en el Ministerio de Medioambiente si pudiésemos ir midiendo en algunas zonas donde hay un excesivo uso de combustión a leña y quema agrícola, no para instalarla permanentemente pero al menos que en invierno disminuye la calidad del aire que respiramos en esta ciudad y Provincia, así que tendríamos que hacer un esfuerzo para al menos determinar qué está pasando», concluyó la Seremi.
