- Aún quedan indigentes itinerantes que se niegan a abandonar sus ‘rucos’: Catastro realizado por equipo del municipio sanfelipeño registra 71 personas en situación de calle, cifra que resulta ser variable, debido a que existe una población flotante proveniente de otras comunas de la provincia.
Tras la nieve que cayó durante el último fin de semana, las bajas temperaturas y el frio extremo no se hicieron esperar y, sin duda, quienes se encuentran más vulnerables a estas condiciones climáticas son las personas en situación de calle, que entre sábado y domingo ocuparon la máxima capacidad que tiene el albergue municipal de San Felipe.
Así lo dio a conocer el Director de Desarrollo Comunitario (DIDECO) de la Municipalidad de San Felipe, Pablo Silva, quien aseguró que los 30 cupos que dispone el Ministerio de Desarrollo Social, más los cinco espacios extra que financia el municipio, se ocuparon en un 100 por ciento, hecho que de todas formas no cubre la necesidad total existente.
“En estas eventualidades, el alcalde Freire nos solicitó que durante lluvias copiosas como en fríos intensos, podamos mantener el albergue abierto durante todo el día, fue el caso de este fin de semana, cuando tuvimos capacidad completa y además estuvimos atendiendo en terreno a las personas que tienen sus ‘rucos’ (sic) formados dentro del territorio, especialmente en las zonas rurales”, detalló Silva
De acuerdo a lo manifestado por el profesional, el municipio sanfelipeño tiene catastradas a 71 personas en situación de calle, cifra que se relativiza diariamente, puesto que “son nómades y se desplazan dentro de las distintas comunas”, hecho que obliga al equipo social de la Municipalidad, estar actualizando y reorganizando constantemente su logística de trabajo, ya que esta cifra indica que sólo el 50 por ciento de los indigentes tiene la posibilidad de resguardarse en el albergue.
“Todo estos números son movibles, por eso que nosotros estamos atentos, porque hay personas que tienen sus rucos establecidos y muchas veces no quieren salir de sus propios logares, estamos hablando de semis mediaguas, que tienen cierta protección, ejemplo específico, los que están detrás de la bencinera del Puente El Rey, ahí hay unos chicos que están habitando ese lugar”, explicó el personero.
En el caso de las personas que continúan pernoctando en el odeón municipal y pidiendo limosnas en Avenida Chacabuco, Silva argumentó que “son situaciones matinales, también movibles, ellos tienen la característica de poder moverse de un lugar a otro, no siempre son los mismos y nuestra intención es atenderlos a través de un equipo multidisciplinario y realizar la intervención que corresponda”, adujo el profesional.
Según aclaró Silva, el protocolo para actuar con estas personas, en primera instancia, es invitarlos a resguardarse en el albergue municipal, donde disponen de cama, cena y desayuno, y sólo en casos puntuales se puede pedir la colaboración de la fuerza pública para trasladarlos a un lugar que no sea donde pernoctan habitualmente.
“En situaciones especiales, como por ejemplo, las bajas temperaturas que tuvimos el viernes, sí con la ayuda de Carabineros, a través de la ruta social calle-noche, nosotros podemos más que invitar, llevar a nuestros vecinos en situación de calle al resguardo correspondiente”, expuso Silva.
En cuanto a las personas que piden limosna y ocupan el sector de juegos infantiles en Chacabuco, entre Coimas y Portus, Silva advirtió que “nosotros le decimos a los vecinos que esas personas están cubiertas con alimentación, por tanto, lo que ellos piden en los semáforos, tiene que ver muchas veces con la ingesta de alcohol, ellos presentan problemas multicausales y nosotros tenemos que estar atentos y cuando traspasan los límites de la convivencia, canalizamos con Carabineros y ellos están facultados para poder ejercer el control que corresponda”, sostuvo.