CALLE LARGA.- A la usanza de tradicionales celebraciones indígenas se realizó este fin de semana, en dependencias del Centro Cultural Pedro Aguirre Cerda, la Chaya Diaguita, actividad que rescata la tradicional leyenda de Chaya, una joven que se enamoró del príncipe de su tribu, quien ignoró sus requerimientos amorosos. Al no ser correspondida, ella se internó en las montañas a llorar sus penas. Fue tanto su llanto y tristeza que se convirtió en una nube, volviendo a mediados del verano del brazo de la diosa Luna (Quilla) en forma de rocío o fina lluvia.
Agradecimientos a la madre tierra y rogativas para que este año las lluvias alivien la cruenta sequía que afecta al Valle de Aconcagua, fueron algunas de las actividades realizadas durante la Chaya.
«Esta es una actividad que rescata antiguas tradiciones que agradecen a través de un carnaval a la madre tierra. Además realizamos un conversatorio donde se habló sobre tradiciones e historia diaguita, y finalmente realizamos la fiesta de la Chaya, donde se celebra con harina y agua a nuestra tierra», sostuvo Darío Manquel Soto, encargado de organizaciones indígenas de la Municipalidad de Calle Larga.
Por primera vez en esta actividad participó la organización diaguita Pakcha, agrupación que fue recientemente conformada en Calle Larga.
«El lunes pasado nos conformamos como agrupación. Quisimos agruparnos ya que como diaguitas sentíamos que nos faltaba agruparnos. Tenemos muchos proyectos en carpeta, como por ejemplo contar con una casa en Calle Larga, cerca de la ruca de los mapuches, ese es nuestro principal anhelo. Ahora la Chaya es una de nuestras primeras actividades y estamos muy contentos de ser una de las agrupaciones que encabeza esta actividad», manifestó Aldo Aballay Espinoza, cacique agrupación diaguita Pakcha.