- Caroline Carvacho, viuda del cabo Montoya, fallecido en el accidente aéreo: «Mi hija de 5 años me dice ‘mamá, yo sólo le pediría a Dios que me diera un día más para estar con mi papá para poder abrazarlo para poder besarlo’».
Este día miércoles 9 de diciembre se cumplió un año del fatídico accidente aéreo del avión de la FACH, el Hércules C-130 en el Mar de Drake.
Se han presentado querellas contra quienes resulten responsables. Los familiares acusan indolencia por parte del alto mando de la Fuerza Aérea, es decir un abandono total.
Este accidente afectó a nuestra zona porque en el avión iba el cabo 1º Luis Montoya, cuya viuda Caroline Carvacho, conversó con nuestro medio, concordando con lo que dicen los demás familiares, reconociendo además que ha sido un año muy complicado: «Todo lo que ha salido en prensa, en televisión, los reportajes y todo eso es cierto, la indolencia por parte de la institución (FACH), la falta de empatía que ha tenido hacia las familias durante todo este año de verdad que es impresionante. Uno esperaría que ellos como Institución estuviesen a otra altura con la familia, pero no ha sido así, ha sido un año bastante complicado desde lo emocional, lo investigativo, tener que enfrentarse a ellos para gestionar, para solicitar, no teniendo favorables respuestas. También el gobierno, en realidad hemos tenido que luchar día a día para poder continuar, tanto con el gobierno como con la institución en sí», señala.
– No sé si es mala o buena noticia que Alberto Espina, ex ministro de Defensa, no está. Me imagino que hubo compromisos con ustedes que hoy debiese haber olvidado, como hoy está en el Consejo de Defensa del Estado.
– Claro, eso fue uno de los grandes temas, hoy en día no está, son cargos que van cambiando en el tiempo rápidamente como hemos visto. Él asumió compromisos con la familia que quedaron totalmente a la deriva, sin nadie hacerse cargo ahora de aquello, y eso de verdad es por lo que estamos trabajando y seguir luchando, porque no es posible que venga una autoridad de gobierno, prometa lo que se le plazca y después si te he visto no me acuerdo.
– Es que esa es la sensación.
– Exacto, cuando uno asume cargos, uno asume con las cosas buenas y malas, entonces si en el gobierno de turno hicieron promesas, se supone que esas promesas están autorizadas por el mismo gobierno, eso debiese cumplirse y eso es lo que nosotros abogamos, estamos luchando, ellos prometieron invertir todos los recursos necesarios para la búsqueda de esa nave, como también buscar a los familiares que iban en ese avión, cosa que no se cumplió. No hay prueba fehaciente y evidente que esas gestiones fueron efectivamente realizadas, y que si no fueron con una deberá ser con otra porque la tecnología a nivel mundial está, entonces son los recursos en que estamos topando para que esté esa tecnología ahí y se pueda meter en ese mar de Drake y poder buscar más partes de lo que era la aeronave, que ayudaría a poder determinar cuáles fueron las causas reales de lo que pasó el 9 de diciembre del año pasado. El último contacto que tuvieron por parte de un ‘flight cell’, de un dispositivo fue a las 18:13, es ahí donde tenemos la última señal que como todavía estaba el avión, por eso es que nosotros apelamos a esa fecha, en muchas partes sale el día de hoy, en algunas lápidas todo eso, porque tuvimos que realizar gestión para hacer los cambios de certificados de defunción, porque efectivamente el día 10 a las 00:40 era la hora que se daba por siniestrada la nave, pero no es el día ni la causa de la muerte de nuestros familiares; bueno, la causa está aún indeterminada, lo único que tenemos como contexto es que a las 18:13 horas fue ese último reporte por un dispositivo que se llama ‘flight cell’.
– ¿Cómo ha sido este año?
– Terrible, terrible porque como decía hay muchas cosas con las que tenemos que lidiar que tienen que ver con la institución.
– Emocionalmente es terrible por la pérdida, ¿pero el no tener respuesta profundiza más el dolor o no?
– Sí, porque te lleva a tener el día a día buscando una u otra cosa para poder seguir luchando, para poder ir a golpear otra puerta. Desde lo particular también es complejo como vivirlo en el día a día, en mi caso yo tengo 3 niños que son pequeños y te juro que no hay día donde ellos se acuerden de él (padre), día en que no me digan que lo extrañan, día que no tengamos pena y eso se hace pesado porque como mamá uno tiene que ponerse esa coraza, tener esa fortaleza para poder explicarle a ellos de una manera distinta que tenemos que continuar.
– Que logren entender en el fondo.
– Claro, la mayor tiene ahora 10 años, ella entiende un poco más, pero así y todo la tristeza la tienen igual porque Luis para ellos era lo máximo, como todo el mundo su papá es lo máximo y haberlo perdido de esta manera imagínense, por ejemplo la de 5 años me dice: ‘Mamá, yo sólo le pediría a Dios que me diera un día más para estar con mi papá, para poder abrazarlo, para poder besarlo’, y así cada día te salen con cosas que parten el alma de lo que avanzas, al final terminas retrocediendo más de lo que avanzas, sumados también a una pandemia que te hace estar casi al 100% en tu hogar, con pocas posibilidades que ellos puedan salir a distraerse, y uno mismo, entonces se suman tantas cosas en un año tan complicado.
– Ante un accidente de esta magnitud, ¿pensaba usted que la institución iba a reaccionar de esta manera?
– Jamás.
– Porque su marido lo dio todo y usted lo decía, la FACH aparte de su familia, lo era todo para él.
– Claro, él entró ahí con un sueño, todos los que entran a una institución así… En realidad hay que tener vocación porque tú tienes que estar disponible y que mucha gente a veces no lo entiende, estar 24/7 para ellos los 365 días del año; acá no existe el cumpleaños de tu hijo, de él o celebraciones de navidad, año nuevo, fiestas patrias; o sea si tienes que ir a trabajar, tienes que ir, no hay excusa. Entonces tú esperarías ahora el retorno, que tu institución estuviese a esa altura con sus familias, independiente de las responsabilidades porque eso no tiene que ver con tema de responsabilidades, tiene que ver con un tema de humanidad, de apoyar a estas familias en el dolor que están sufriendo, porque pueden ser o no culpables, eso lo determinará la propia investigación, todo apunta que sí.
Dice que concuerda plenamente con la opinión de los demás familiares, cuyo común denominador es que el avión no debió haber salido: «No, no, de ninguna manera, de hecho el vuelto estaba planificado para el día siguiente, el 10. Ellos llegaban el 9 y al día siguiente estaba planificado la entrada a la Antártida, y desconocemos por qué razones adelantaron esa entrada, supuestamente había mal clima en los próximos días e iban a tratar, pero te das cuenta que adelantaron un viaje no estando las condiciones de esa aeronave, no estando las condiciones meteorológicas, entonces da qué pensar, ¿cuál era el apuro? Si sabían que habían fallas, que su misma gente les dijo que no se podía volar y ellos hicieron caso omiso, alguien dio la orden que tenían que volar sí o sí, con una carga peligrosa que iba en esa aeronave que no debiese haber ido mezclada con pasajeros ahí», indica Caroline.
– Lo otro fundamental es el audio del cabo eléctrico que mandó a su madre.
– Sí, él de alguna manera le indica que hay una falla y que si bien la falla era de su área, pero él no tenía repuesto ahí en Punta Arenas, sino que mandárselo a buscar a Santiago y eso llegaría el martes. Si bien es cierto que es una falla que reporta de alguna manera la dificultad de los repuestos que hay, cosas que fallan que necesitan ser reparadas y todo, pero con esa… de alguna manera habría podido sobrevolar. Pero a través del tiempo te vas dando cuenta que también se suman otras fallas más y hay algunas que han ido tomando más peso y que están más sustentadas, y te das cuenta que en realidad, si estaba ese avión en esas condiciones y con lo que hoy en día hasta la fecha sabemos en lo que va, no debería haber volado por ningún motivo.
– Se dice a veces que en algunas circunstancias de la vida hay que gritar más fuerte ¿Qué gritaría más fuerte en este momento?
– Llamar a las consciencias de las autoridades, hablar a las consciencias de los altos mandos de la institución, porque no sé cómo ellos podrán dormir con esta tremenda carga encima, sobre todo hoy en día que ellos se van a retiro. Ahí yo apelo a las autoridades a también alzar su voz, porque hay cosas que no pueden pasar.
En el avión viajaban 38 tripulantes, todos los cuales fallecieron.