La justicia tardó pero finalmente llegó para una joven madre que sufrió reiteradas violaciones por parte de un adulto mayor que, al mediodía de ayer martes, tras su respectivo juicio, fue procesado y condenado por el Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe.
ULTRAJE ERA PERMANENTE
Los hechos de la acusación que elevó la Fiscal de Delitos Sexuales, Daniela Quevedo, se remontan a principios del año 2005, cuando la víctima con capacidad mental disminuida tenía 27 años y vivía con su madre. En aquel tiempo, por apuros económicos la dueña de casa decidió arrendar un dormitorio de la vivienda al imputado identificado como Pedro Antonio S.B. Las investigaciones policiales apuntaron que el condenado aprovechó la condición mental de la mujer para abusar de ella cuando se encontraba sin la presencia de su madre. Su testimonio fue crucial a pesar de tener problemas para comunicarse, la afectada acusó haber sido víctima de reiteradas violaciones cuando el hombre la trasladaba hasta un dormitorio y accedía carnalmente a ella.
QUEDÓ EMBARAZADA
Producto de estos abusos la mujer resultó embarazada y luego de diversos peritajes, la Fiscal del Ministerio Público presentó al tribunal los resultados de exámenes de ADN, demostrando que el acusado era el padre de la menor, arrojando un 99,99% de probabilidades tras un informe del Servicio Médico Legal de Valparaíso.
Esta prueba, junto a los testimonios de la víctima, su madre, perito psicológico del Servicio Médico Legal y los funcionarios policiales de la Brigada de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones, fueron fundamentales para generar convicción a la terna de jueces que emitieron un veredicto condenatorio en contra del acusado quien goza de libertad.
En los Alegatos de Clausura, la persecutora insistió en el historial de vida de la víctima, una mujer que tuvo un desarrollo psicomotor tardío asistiendo a escuelas especiales por su deficiencia al comunicarse con los demás. Sin embargo la tranquilidad de su vida junto a su madre se vio interrumpida cuando el imputado constantemente la violó y producto de ello nació una niña, quien actualmente tiene nueve años de edad.
BAJA CONDENA
Pese a todos los lamentables hechos, la fiscalía pretende obtener una condena de diez años de presidio en contra del hoy condenado. No obstante por el transcurso del tiempo existe una media prescripción del caso, donde los jueces podrían rebajar la sentencia.
“Se acompañó una pericia de ADN de la hija de la víctima, la enajenación mental moderada fue evidenciada por la afectada en su testimonio y el perito psiquiátrico que lo establece en su informe lo que significa que ella está incapacitada de consentir una relación sexual. Claramente el ADN es fundamental como antecedente que ella fue accedida vía vaginal por el acusado durante el período del 2005 antes que naciera la hija de la víctima”, relató la Fiscal Daniela Quevedo Henríquez.
No obstante, la comunicación de la sentencia será a dada a conocer este fin de semana en la sala del Tribunal Oral en Lo Penal de San Felipe.
Pablo Salinas Saldías.