- Su aprobación podría durar hasta dos años:
Luego que el pasado viernes 9 de enero División Andina presentara ante la Dirección Nacional del Servicio de Evaluación Ambiental un meticuloso Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de 4.500 páginas, en el que presenta la solicitud para ejecutar modificaciones geográficas para mover su campo de operación en el Rajo Don Luis (a 28 kilómetros entrando por Saladillo), con lo que se busca alejarse de las zonas de glaciares de roca, a otras que no presenten ese riesgo, aunque tengan permisos para hacerlo en la actualidad, por lo que se propone con dicho estudio sería entonces correr el radio de trabajo hacia zonas en dirección al Área Metropolitana y al Noroeste, pero conservando siempre las actuales 358 hectáreas permitidas, estas ubicadas a 2.038 msnm, así lo informó ayer miércoles Jorge Sanhueza, gerente de sustentabilidad de Codelco Andina ante medios del Valle de Aconcagua, en Los Andes.
– ¿Qué pretende Codelco al presentar este EIA?
– Lo que nosotros estamos haciendo es modificando con este Estudio de Impacto Ambiental (EIA) que presentamos el 9 de enero ante la Dirección Nacional del Servicio de Evaluación Ambiental, el actual Rajo Don Luis y también de su depósito de lastre asociado (…) El objetivo principal es alejarnos de la zona glaciar y también habilitar el depósito de Aguas de Contacto (las que bajan de la nieve por las montañas al río) en cuanto a ampliar la capacidad de tratamiento de Aguas de Contacto que hay en ese sector.
– ¿Cómo han interactuado ustedes con las comunidades cercanas a la zona minera?
– A nosotros lo que nos importa de este EIA que modifica sólo la obra de lo que es la mina, es que la comunidad lo conozca y lo entienda, durante octubre, noviembre y diciembre nosotros desarrollamos una participación ciudadana en la que nos reunimos con todas las comunidades, con sus líderes y también con los vecinos, además hicimos un casa a casa y sedes abiertas, en esas reuniones explicamos a la gente en qué consiste este proyecto, lo han entendido y nos dieron sus inquietudes también en relación a lo que les preocupa, para poder incluirlo en este proyecto.
– ¿Cuáles son las características de esta zona glaciar que Andina busca proteger?
– El yacimiento de Andina tiene en sus proximidades glaciares de roca, no cuenta con glaciares blancos, lo que estamos haciendo con este estudio es modificando los permisos actuales que tenemos (hasta el año 2038) y que nos permiten acercarnos y hasta intervenir algunos de esos glaciares, nosotros en cambio estamos buscando alejarnos de esos glaciares, nuestro compromiso es no afectar estas zonas de glaciar con estas modificaciones que estamos haciendo, de esa manera, manteniendo los permisos que tiene hoy día Andina, la producción que tenemos, la vida útil y así no modificamos nada de eso, lo único que se modifica es la forma del rajo y de su depósito de lastre para alejarse de los glaciares.
– ¿Cree usted que están haciendo las cosas de manera tal que la sociedad quede satisfecha?
– Hoy día nuestra sociedad nos exige una mirada diferente para hacer Minería, y lo que División Andina hace es eso, adecuar su permiso existente aprobado ya, y eso es no afectar los glaciares, creemos que estamos a la altura de lo que la misma comunidad espera de nosotros, esperamos por lo tanto que este EIA tenga una buena recepción, lo que sería muy positivo para nosotros y el medioambiente.
LA PANORÁMICA
Así las cosas y si esta modificación se aprobara en los 18 meses a dos años que podría durar estas tres rondas de observaciones, habría entonces trabajo para al menos unas 450 personas durante los tres años de faenas, también se invertirían unos USD$ 250 millones en la nueva planta de acondicionamiento de aguas de Contacto y obras complementarias, además, estas modificaciones también contemplan resguardar sectores históricos, turísticos y de importancia medioambiental.
Según Jorge Sanhueza, la aprobación del EIA permitirá asegurar la continuidad operacional, manteniendo el actual empleo, producción y aporte al Valle del Aconcagua y al país, aún así, la Flora, Fauna y otros elementos de la naturaleza en las zonas cercanas o en sus cercanías, se verían afectadas.
IMPACTO / COMPENSACIÓN
Habrá una pérdida de 6,7 hectáreas de formaciones vegetales de tipo singular, lo que implicará la pérdida de distintos tipos de matorrales y especies de flora, entre ellas la Llaretilla (Laretia acaulis), que se encuentra en categoría de conservación, listada como Preocupación Menor, según el Decreto Supremo N°42 del Ministerio del Medioambiente.
Por ello la compensación que Andina ofrece detalla la creación de un Área de Compensación Integral de Ecosistemas Terrestres de 87 hectáreas en el sector de la Quebrada Barriga (ubicada, aproximadamente a 3 km al oriente del área de influencia del proyecto), la que presenta características de vegetación, flora vascular, y hábitat de fauna similares a los del área de influencia del proyecto.
La compensación considera el resguardo del área, mediante la exclusión de actividades con el fin de proteger y conservar elementos singulares asociados a los ecosistemas terrestres. Las principales acciones a implementar en el área de compensación corresponden a la elaboración de un Plan de Manejo, la realización de un estudio de línea base, la implementación de una estación meteorológica y una estación de material particulado sedimentable, y a la relocalización de especies de fauna que se rescatarán desde el área de intervención del proyecto.
NO MÁS RATONES
En cuanto a la afectación de la Lagartija de Bell (Liolaemus Bellii), el Ratón oliváceo (Abrothrix olivaceus), el Ratoncito andino (Abrothrix andinus), la Rata topo del matorral (Chelemys macronyx) y el Ratón orejudo amarillento (Phyllotis xanthopygus), y su hábitat, Codelco propone el rescate de estas especies mencionadas y relocalizarlas en el Área de Compensación Integral de Ecosistemas Terrestres en la Quebrada Barriga.
También se afectará el sitio arqueológico identificado como Río Blanco 2, en ese caso se compensaría con la elaboración de un registro superficial del sitio arqueológico Río Blanco 2, con el objetivo de preservar la información, mediante fotografía y levantamiento topográfico de todos los rasgos relevantes, adicionalmente se elaborará un libro sobre el periodo prehispánico del Valle del Aconcagua, con el objetivo de documentar y difundir información sobre el periodo, y se realizará la puesta en valor del circuito arqueológico Río Blanco-Camino internacional, con el objetivo de caracterizar y destacar los sitios arqueológicos ubicados en el sector alto del Camino Internacional.
Roberto González Short
ENVIADO ESPECIAL