Además, la iniciativa busca reunir a los padres con sus hijos y fortalecerlos vínculos afectivos entre la población penal.Además, la iniciativa busca reunir a los padres con sus hijos y fortalecerlos vínculos afectivos entre la población penal.
Además, la iniciativa busca reunir a los padres con sus hijos y fortalecerlos vínculos afectivos entre la población penal.
Además, la iniciativa busca reunir a los padres con sus hijos y fortalecerlos vínculos afectivos entre la población penal.

LOS ANDES.– Por medio del Programa Abriendo Caminos, el cual entrega atención a menores de edad que sean hijos de internos, las asistentes sociales Viviana Schultzy Joyce conocieron el centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes. Este fue el comienzo de una relación que hoy las tiene realizando el proyecto denominado ‘Abriendo Caminos a la Lectura’.

La iniciativa es financiada por el Consejo de la Cultura y las Artes, se realiza una vez a la semana y se mantendrá durante dos años. En un principio se trabajará solamente con las mujeres del penal, para luego extenderse a la población masculina. Además, se efectuarán sesiones entre las madres y sus hijos y los padres con sus hijos.

La iniciativa es financiada por el Consejo de la Cultura y las Artes, se realiza una vez a la semana y se mantendrá durante dos años.
La iniciativa es financiada por el Consejo de la Cultura y las Artes, se realiza una vez a la semana y se mantendrá durante dos años.

Viviana sostuvo que “se tendrá la posibilidad de que los niños se acerquen a sus papás a través de la lectura. Además, les permite recrearse y también es una forma de pensar en otras cosas y, de alguna manera, olvidarse de que están presos. Es un pequeño espacio de libertad”.

La asistente social añadió que por medio de este trabajo en equipo las internas podrán establecer o fortalecer vínculos afectivos, tanto con sus hijos como con sus propias compañeras.

Por su parte, la Jefa del Área Técnica de la unidad andina, Hada Lizana, sostuvo que “el año pasado tuvimos un taller de literatura que fue un proyecto que nos llegó desde la Dibam (Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos) y el año anterior habíamos hecho otro taller literario a cargo de un profesor de enseñanza media de Los Andes y que dio muy buenos resultados”. Además de una lectura colectiva, durante el taller se contemplan doce sesiones de una hora y media cada una, se efectúan trabajos tales como elaboración de acuarelas o creación de poemas, entre otras actividades.

 

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