Autoridad Sanitaria realizó muestras de agua en Río Rocín y en plantas de Agua Potable Rural y Urbana
Seremi de Salud (s) Valparaíso, Dr. Mario Méndez.
- El gobernador provincial Eduardo León y el alcalde de Putaendo Guillermo Reyes habrían solicitado un estudio acabado para poder determinar la calidad de agua potable que están consumiendo más de 10 mil vecinos de la comuna de Putaendo.
Con el afán de obtener mayores antecedentes respecto de la denuncia publicada hace exactamente una semana, respecto de la alta presencia de metales pesados en el Río Rocín, la autoridad sanitaria, durante estos días, realizó un muestreo a las aguas del mismo lecho del afluente, así como también, en los accesos y salidas de las plantas de Agua Potable de Esval y APR del Putaendo.
Así lo informó el jefe de la Oficina Provincial de la Seremi de Salud Aconcagua, quien en su condición de seremi subrogante declaró que “ nosotros hemos hecho un reconocimiento de las áreas en torno al consumo de agua potable, en donde tenemos una planta de agua potable Rural (APR), la cual tiene la responsabilidad de suministrar el vital elemento a unas 1200 personas; y también al sistema de producción de agua de Esval, que surte a más de 10 mil vecinos en el sector urbano de Putaendo”, detalló la autoridad.
Según Méndez, se realizó un análisis físico y químico, de tal manera de poder determinar qué ocurre con la presencia de metales pesados en el suministro de agua que se proporciona a la comunidad putaendina. Las muestras fueron enviadas al laboratorio ambiental en Viña del Mar y los resultados debieran estar listos durante la próxima semana. Según el galeno, en caso de confirmarse la presencia de metales pesados en las aguas del Río Rocín y, en el peor de los casos, en el suministro de agua potable con el que se está abasteciendo la comunidad, habrá que estudiar qué medidas se pueden tomar para asegurar el bienestar de la población.
Méndez, se mostró esperanzado en que los resultados no coincidan con los niveles de contaminación que se evidencian en el estudio de Hydrolab, asegurando que “hay una responsabilidad de los comité de APR y de la empresa sanitaria de suministrar agua potable ajustada a la norma chilena (…) las plantas tienen los sistemas de abatimiento para poder neutralizar metales y minerales, eso lo hemos visto a propósito de otros incidentes ambientales de actividad minera”, determinó el profesional, haciendo alusión al derrame de cobre que hace un tiempo afectó al Río Aconcagua.
“Nosotros esperamos que el abatimiento que realizan, tanto la planta de APR como la urbana, permitan asegurar que el recurso que está siendo consumido, esté dentro del marco de lo normal, sino tendremos que ver la forma de detener ese consumo, manejando la situación de tal manera que el abastecimiento se suministre de acuerdo a lo que exige la norma”, especificó el facultativo.
Respecto a si los estudios realizados, permitirán también conocer cuáles son las probables fuentes contaminantes del Río Rocín, Méndez aclaró que esta no es la prioridad de los estudios, fundamentando que “nosotros podemos hacer la investigación correspondiente, pero hay que entender que la responsabilidad principal y más inmediata, es poder tener la certeza de que las aguas que está consumiendo los vecinos de Putaendo, están dentro de los marcos de la norma para el consumo de agua potable, nuestra primera responsabilidad es la salud de las personas y en ese sentido estamos realizando las mediciones”, explicó.
“Son otros los organismos del estado quedeben vigilar ambiente y realizar una fiscalización y control más directo de las mineras, los que tendrán que responder respecto de los orígenes, en el caso de que las mediciones salgan alteradas”, añadió el seremi de Salud (s).
