Bernabé Espinoza: Un ejemplo de tenacidad y superación personal

• Masoterapeuta ciego habla con Diario El Trabajo:

Es uno de los profesionales de la salud más queridos y respetados del Valle de Aconcagua; tiene 58 años de edad; casado, tiene una hija y un nieto, su profesión es Masoterapeuta, es titulado en la prestigiosa Escuela Helen Keller y además es ciego. Se llama Bernabé Espinoza Olivares y desde hace 19 años labora en el Cesfam San Felipe El Real, en San Felipe.

UN TRIUNFADOR
Diario El Trabajo habló con este experto masajista, él nos compartió detalles de su infancia y también de su trabajo.
«Hace 23 años me titulé, pasé bastante tiempo buscando trabajo, nadie creía en mí, pero eso no me hundió, más bien tomé más fuerzas para seguir intentando salir adelante, hasta que me contrataron aquí en este Cesfam, desde entonces he laborado acá», asegura Bernabé.
Este profesional nació en Los Andes, pero desde chico vive en nuestra comuna. «Yo sufrí un accidente doméstico cuando tenía 11 años de edad, esto me afectó la vista, primero perdí mi capacidad de ver en el ojo izquierdo y luego en el derecho, no veo del todo. Ahora, siendo ya un adulto, pienso que los sueños que tenía en mi corazón los he cumplido, por ejemplo poder trabajar, ganarme la vida por mí mismo; llegar a tener una esposa, Carolina es esa bella esposa, ser papá, tengo a una inteligente hija (Hurí), y de yapa hasta un nieto y una nietecita: Eduardito E Isabella, ¿qué más puedo pedir?», agregó Espinoza.
– ¿Qué palabras tienes para otras personas en situación de discapacidad?
– Les puedo decir que tienen que buscar siempre en su interior lo mejor que tengan de sí mismos, y que lo que puedan sacar de ahí, lo pongan al servicio de los demás, si ven su discapacidad como una tragedia insuperable, yo les aconsejo que la tomen como una gran oportunidad para demostrarse de qué están hechos, y si realmente es insuperable, pues que pacten con esa situación y saquen el mejor provecho a las oportunidades que ahora hay, pues los tiempos han cambiado y hay muchas puertas que se abren para nosotros.
Roberto González Short