El 28 de agosto será el último día:
Aplicación del Plan Maestro de Tránsito en San Felipe, estallido social de octubre y pandemia terminan por pasarle la cuenta a un negocio de mucha tradición familiar en San Felipe, que funcionó por más de sesenta años y que el próximo viernes 28 de agosto cerrará definitivamente sus puertas, o como dicen los comerciantes, «bajará sus cortinas». Se trata de ‘Bicicletas Carvallo’, taller ubicado en calle Prat 73. Actualmente está siendo administrado por Eugenio Carvallo, hijo del matrimonio conformado por Hortensia Díaz y Eugenio Carvallo.
El ‘Keno’ Carvallo, en conversación con nuestro medio, confirmó la noticia reconociendo que es una decisión difícil, triste, «pero hay motivos sentimentales en cuanto a que el negocio ‘Bicicletas Carvallo’ lo creó mi padre en año 1952 en calle Salinas, cuando compró la propiedad en calle Salinas, ahí entre Prat y Santo Domingo, y él acaba de fallecer ahora a fines del mes de junio, así es que ahí tomé la decisión porque él fue el artífice de esto y ya no está, entonces no había motivo para seguir manteniendo este local, y por otro lado también gatilló estos últimos tres años; 2018, 2019 y ahora el 2020 que hemos venido sufriendo circunstancias extra comerciales que afectaron al comercio en general de esta calle. Este sector, exclusivamente esta cuadra, ya quedan pocos locales abiertos, o sea ya han cerrado muchos locales, ya quedan cuatro a cinco locales abiertos, como no hay continuidad de varios locales que pueda la gente transitar, venir a vitrinear, eso hace que sea poco atractivo, digamos comercialmente, para instalarse, y sobre todo si hay que pagar arriendo, eso lo perjudica mucho más porque lamentablemente los arriendos se llevan mucha parte de lo que uno puede ganar en el negocio», señaló.
Rescató que él depende de otros ingresos que tiene por lo que espera seguir en otro rubro.
– ¿Qué hay de cierto que está trabajando para pagar el arriendo, en palabras simples?
– En palabras simples es lo que está pasando, porque antes de la cuarentena y ahora después de la cuarentena, prácticamente la gente sale medio día; yo abro en las tardes y la gente sale muy poco. El día sábado no se puede abrir, los horarios de trabajo son acotados y trabajar así, en estas circunstancias que no es normal, al final el que gana más plata es el dueño del local que uno como comerciante.
– ¿Qué importancia reviste para usted el perjuicio ocasionado por la aplicación del Plan Maestro de Tránsito?, teniendo en cuenta que usted en su momento fue el vocero de los comerciantes que manifestaban su malestar, ¿también tiene que ver que le vaya mal comercialmente en este sentido o no?
– Indudable que afectó al comercio en general, no solamente a mí, porque el tema fue que cuando se sacaron los estacionamientos superficiales no tuvimos alternativa que la gente o el cliente pudiera estacionar en otro lugar, entonces pasó mucho tiempo en que las autoridades se dieran cuenta de que había que tener estacionamientos privados para que la gente pudiera estacionar, como que nunca entendieron de que el comercio no solo se abastece de clientes que viven en San Felipe, mayoritariamente los clientes que vienen son fuera de San Felipe, de Catemu, Llay Llay, Putaendo, esa gente viene en su vehículo y tiene que estacionarse, entonces ¿qué pasó después de siete meses que tuvimos la calle cerrada?, que esa gente al no tener estacionamiento… se fue a comprar a Los Andes sencillamente y ahí fuimos perdiendo clientela; después vino lo de octubre que nos perjudicó más todavía y ahora esto, así es que la verdad quiero dormir tranquilo, no tengo deudas y no quiero hacerme de deudas, así es que por eso tomé la triste decisión de cerrarlo. La verdad que para mí esto de la bicicleta era algo que disfrutaba porque siempre me ha encantado la bicicleta y mi padre me enseñó desde chico a arreglar bicicletas, y la verdad que vivió momentos muy lindos en este rubro.
– ¿Cuándo cierra ya Eugenio?
– El viernes 28 ya entrego el local, ya lo he estado desocupando de a poco y ya el viernes 28 bajo las cortinas y me dedico a otra cosa (ríe).
– ¿Cómo se imagina ese día?
– Mira, no te puedo negar que hay sentimientos y preocupación porque yo he trabajado toda mi vida, llevo trabajando de los 19-20 años sin parar en diferentes cosas, estuve metido en la agricultura, intercalado también con la preocupación de trabajar, de encargarme de este local, y nunca he estado sin hacer nada, pero algo habrá que inventar.
– ¿Va a llorar ese día yo creo?, porque son años de un negocio familiar.
– Sí, claro, la verdad que la cuarentena me sirvió para tomar la decisión, meditarlo y con mi familia, con mi madre que también me apoya… mi madre está muy de acuerdo también de la decisión que yo tomé, porque la verdad que este negocio yo lo mantuve por años, más por mi madre estos últimos años, para que ella viniera, se entretuviera, pero ya ella por su edad dejó de venir así es que ya no habían más motivos como para mantenerlo. Sólo queda agradecer a las miles por no decir cientos de personas que llevaron a reparar su bicicleta o comprar más de un repuesto, una cámara.
Reiteramos, el día viernes 28 de agosto baja sus cortinas ‘Bicicletas Carvallo’.