PUTAENDO.- A pesar de no existir una versión oficial, altas fuentes confirmarían que la empresa Colbún, que posee derechos de agua no consuntivos y permanentes en el Río Rocín, habría desconocido un acuerdo firmado con la Junta de Vigilancia del Río Putaendo (JVRP) en agosto del año 2012 en el Ministerio de Obras Públicas, mediante el cual devolvería las aguas antes de la cortina del embalse y así permitir su llenado.
Recordemos que el ex director nacional de la Dirección General de Aguas, Matías Desmadryl, fue duramente cuestionado luego que entregara derechos de agua en el Río Rocín a la empresa Colbún, incluso la Senadora Lily Pérez, públicamente en ese entonces, pidió la renuncia al alto funcionario, el que finalmente producto de su grave error debió renunciar al cargo.
Luego del escándalo registrado ese año y gracias a las presiones de la comunidad, incluidas protestas y movilizaciones, y con el importante rol de los parlamentarios y las autoridades locales se logró firmar un protocolo de acuerdo entre la Junta de Vigilancia del Río Putaendo, el Ministerio de Obras Públicas y la empresa Colbún, que aseguraba que la empresa Colbún restituiría los derechos de agua a la Junta de Vigilancia y que en conjunto desarrollarían los proyectos de dos centrales hidroeléctricas, donde Colbún mejoraría las condiciones que había ofrecido en un principio una empresa alemana que iba a desarrollar el proyecto de las centrales hidroeléctricas con la Junta de Vigilancia del Río Putaendo.
Estas reuniones incluso contemplaron la directa participación del aquel entonces Ministro de Obras Públicas Laurence Golborne, y según señaló la Senadora Lily Pérez en ese entonces, el Presidente Sebastián Piñera también ayudó a solucionar este tema.
Colbún consideraría inviable construir centrales hidroeléctricas en Putaendo
Siempre en el plano extraoficial, el martes de esta semana altos personeros de la empresa Colbún habrían acudido hasta la sede de la JVRP, para informar que luego de los estudios técnicos realizados por Colbún, construir dos centrales hidroeléctricas en la cuenca del Río Putaendo “sería inviable desde el punto de vista económico”, por lo que finalmente no ejecutarán los proyectos acordados.
Pero esto no sería todo, pues Colbún habría notificado a los regantes de Putaendo que no estaría en sus planes entregar los derechos de aguas que poseen, y que si la Junta de Vigilancia desea desarrollar de igual forma los proyectos de hidroeléctricas con otras empresas, debería pagar una alta suma a Colbún que extraoficialmente se habla de cientos de miles de dólares.
Esta grave situación echaría por tierra todo lo anunciado el año 2012, donde basta ver los comunicados de prensa de la ex Gobernadora Patricia Boffa, quien textualmente informaba: “Siempre dijimos que se iba a lograr una solución concreta y eso es lo que tenemos ahora, faltan algunos detalles menores por acordar, pero puedo reiterar a la gente de mi comuna de Putaendo, que tal como lo señaló el Presidente Piñera, que la decisión de construir un embalse es para asegurar el riego en años de sequía y así será”.
Agregó la Gobernadora Patricia Boffa que si bien hubo aprovechamiento político del tema, al final primó el interés común por dar una solución efectiva y rápida para Putaendo, y que es lo que ahora interesa.
También en el ámbito extraoficial la Junta de Vigilancia habría realizado un ofrecimiento a Colbún para que entreguen los derechos de agua que poseen en el Río Rocín a los regantes, en un acto público en la comuna de Putaendo, y puedan quedar bien posicionados ante la opinión pública, ofrecimiento que los representantes de Colbún estarían analizando.
Junta de Vigilancia guarda silencio
Diario El Trabajo quiso tener la versión del Presidente de los regantes de Putaendo, José Manuel Cárter, quien no confirmó ni desmintió esta información y solo señaló que por acuerdo del directorio de la Junta de Vigilancia no se referirá públicamente a este tema.
Lo concreto es que según nuestros antecedentes, que por supuesto no son oficiales, Colbún estaría por una parte desconociendo los acuerdos, y por la otra exigiendo dinero para que la JVRP desarrolle los proyectos hidroeléctricos con los cuales los regantes esperan pagar la parte no subsidiada del embalse. Debido a todos estos antecedentes extraoficiales, hoy no existe claridad si las aguas para llenar el embalse Chacrillas estarán aseguradas, por lo que también es primordial que alguna autoridad o las partes involucradas entreguen una información clara a la opinión pública.
Patricio Gallardo M.