A otro lo dejó condicionalLos alumnos son de cuarto medio y deben rendir la PSU en noviembre, situación que les preocupa. Un alumno del Colegio Pumanque expulsado, otro en situación condicional y varios que estarían amenazados en caso de participar de actividades, fue la sanción que habría impuesto el establecimiento, luego de las manifestaciones en que participaron los alumnos, en apoyo a las actividades de los estudiantes a nivel nacional.El alumno expulsado es Michael Cruces, actualmente cursa cuarto medio y se encuentra bastante preocupado, ya que lleva una semana sin asistir a clases y en noviembre debe dar la PSU.Según señala el alumno, él recibió una carta donde se le expulsaba del colegio, argumentando una transgresión al artículo 3.27 del Reglamento de Convivencia, donde se establece que el alumno “planificó, organizó, dirigió, participó y ejecutó interrupciones de la actividad escolar normal, con paros dentro del plantel, los días 16 y 21 de junio, pasado”.Ante estos antecedentes, Michael señala que todas las actividades que realizaron fueron conversadas con la dirección del establecimiento y con los alumnos, «nunca nos dimos de líderes de estas movilizaciones, solamente participamos al igual que 126 ó más compañeros».El joven señala que el día 16 de junio se realizó el paro nacional y ese día no asistieron al colegio, situación que estaba autorizada por los apoderados.En tanto en relación al día 21 de ese mismo mes, los alumnos realizaron 3 días de paro, actividad que habría estado autorizada, luego de una asamblea de estudiantes, de la que estaba informado el director y quien habría firmado su realización, junto a los representantes estudiantiles.La situación también preocupa a la mamá de Michael, quien todavía no sabe qué acciones tomará, ya que está a la espera de una respuesta de parte del colegio a una carta de apelación de la medida. «Y no sé qué medida tomar, si lo cambio de colegio o qué puedo hacer, porque yo lo veo mal a él, ha estado nervioso», sostuvo Miriam Cortés.Este alumno además se encontraba condicional, ya que anteriormente había tenido un problema con un inspector.Frente a las acciones que realizaron los alumnos, como parte de las movilizaciones, Miriam apoyó a su hijo para que saliera a marchar a la calle y le prohibió realizar acciones en el colegio, «y así dice que fue y yo le creo a mi hijo».Según señaló el concejal Mario Sottolichio, varios de los alumnos que participaron en las manifestaciones se encontrarían amenazados, y de participar en otra actividad similar, serían separados del establecimiento.«Esto nos parece gravísimo, no se condice, no es proporcional con las faltas o errores que los jóvenes hayan tomado, ninguna actividad se desarrolló sin el consentimiento del director, hay acuerdos firmados en que el director ha estado informado plenamente y de acuerdo a las actividades que se hicieron, esos protocolos fueron respetados de parte de los alumnos, por lo tanto es llamativo que se tome una medida tan desproporcional, en un colegio que recibe subvención del Estado y que dice orientarse en los valores cristianos».El edil señaló que buscan que la medida sea reconsiderada, y en el caso de que eso no suceda van a recurrir a los tribunales para pedir una protección judicial, para proteger el derecho a la educación de los jóvenes.