- Cortejo fúnebre pasó por las afueras de Carabineros y realizó una misa al interior de Villa 250 Años.
Aunque se esperaba que ocurriera algún tipo de incidente en el marco del funeral de Ramón Otárola Segura, vecino de 51 años de Algarrobal que fue asesinado de un tiro de escopeta la madrugada del sábado, lo cierto es que la despedida que le hizo ayer por la tarde gran cantidad de vecinos fue bastante tranquila. Eso sí, con la presencia permanente de personal policial.
Carabineros dispuso un servicio especial ante la preocupación que se había instalado por la ocurrencia de incidentes menores en la Villa Nueva Algarrobal, donde tenían residencia víctima y victimario, no obstante, en general la misa, el cortejo fúnebre y posterior entierro, se realizaron sin inconvenientes.
“El funeral se realizó sin incidentes, sin inconveniente alguno. La ruta del cortejo fúnebre consideró como punto de partida la Población Nueva Algarrobal, con destino a San Felipe, dando vueltas por algunas poblaciones donde la víctima tenía algunos familiares, para luego dirigirse a la Villa 250 Años donde se realizó una misa muy breve y finalmente trasladarse al Cementerio de Almendral, en completo orden, en completa tranquilidad”, señaló el teniente Ángelo Acevedo, de la Segunda Comisaría de San Felipe.
El oficial policial reconoció que “se presumía que en este funeral pudiera incluso haber utilización de armas de fuego, pero afortunadamente no hubo ningún incidente, ni disparos, ni se detectó a alguna persona portando algún elemento de este tipo”.
Cabe consignar que el presunto autor de este homicidio, identificado con las iniciales C.H.J.I., de 21 años de edad, fue puesto a disposición del Tribunal de Garantía de San Felipe, donde se le formalizó por el delito de homicidio simple, quedando sujeto a la medida cautelar de prisión preventiva.