Roberto González Short deja Chile tras 12 años en Aconcagua:
Llegó a tierras chilenas en julio del año 2010, vino invitado por la escritora sanfelipeña Azucena Caballero Herrera, con quien en 2011 contrajo matrimonio. Se trata del periodista costarricense Roberto González Short, dinámico reportero gráfico que en su recordada motocicleta recorrió cada uno de los rincones del Valle de Aconcagua durante los doce años de trabajo periodístico que desarrolló desde la trinchera informativa de Diario El Trabajo.
Hoy miércoles este comunicador centroamericano es noticia, pues tras haberse ‘apañado’ con las Fuerzas Vivas del Aconcagua, presentó su carta de renuncia al director de nuestro medio Marco Antonio Juri Ceballos, una renuncia que nadie se esperaba, ya que su fórmula de trabajo significaba un accionar que apuntó siempre a lograr tener las mejores gráficas para nuestro diario, llegando a veces primero que los cuerpos de emergencias a los lugares de los accidentes, incendios y demás tragedias, esto gracias al monitoreo de frecuencias de Bomberos que él siempre sostenía.
«VUELVO A CASA»
Diario El Trabajo habló con González Short este martes vía telefónica, ya que él se desvinculó por completo de Chile este viernes 19 de agosto cuando voló a su país natal, Costa Rica.
«Más que estar agradecido con Diario El Trabajo y con sus fieles lectores por haberme permitido ser parte de la historia, hoy me despido con nostalgia de mi casa de trabajo, laboré con excelentes reporteros como lo son Pablo Salinas, Carlos Novoa, Raúl López y el propio Marco Antonio Juri, de quienes aprendí harto. Pude en estos años crear también documentales sobre el folklore, la cultura y costumbrismo chileno. Viví sus temblores, heladas, el estallido social, la pandemia también me tocó vivirla en las calles y pasajes de nuestras comunas; sufrí al ver a nuestros vecinos dentro de bolsas negras de plásticos y ser sepultadas de la manera más indigna para ellos y sus familias; pude también aprender lecciones de vida al lado del equipo de trabajo del ahora exalcalde Patricio Freire; disfruté además del cierre de gestiones de don Jaime Amar en su calidad de autoridad comunal; con Patricia Boffa, Eduardo León y Claudio Rodríguez disfruté las largas jornadas de trabajo en terreno, en fin, me dejo para mí sus mejores enseñanzas y por ello vuelvo a casa más que satisfecho», comentó el comunicador costarricense.
MUCHOS HOMENAJES
Una vez que González Short presentó su renuncia, recibió varios homenajes de distintas personas e instituciones del Valle, de la Sociedad de Escritores de Chile (Aconcagua) se dejó regalonear con una emotiva despedida, ocasión cuando recibió muestras de mucho cariño, palabras del director de Diario El Trabajo y algunas sorpresas; Restaurante La Ruca dedicó al ‘gordito de la moto’ una cálida despedida; el folclorista Pedro Plaza y Fernando Montenegro ‘Caballito Blanco’, le dedicaron sus mejores presentaciones artísticas. También el Círculo de Columnistas de Diario El Trabajo ofreció sus parabienes a quien supo ganarse el corazón y cariño de los sanfelipeños.
SIEMPRE EL AMOR
Consultado por las razones para abandonar nuestro país, Roberto González nos explicó que «siempre el amor ha sido en mi vida la principal fuerza que impulsa mis acciones, sea amor al trabajo, al periodismo, a la cultura y a la Mujer, es por este último que decido dejarme embriagar, me casaré este 10 de diciembre con la secretaria costarricense Carmen Solís Hernández. Ella y yo ya nos conocíamos desde jóvenes, pero hasta ahora decidimos jugarnos todas nuestras fichas y apostarle al Amor», añadió.
Marco Antonio Juri Ceballos, director de nuestro medio, comentó tras la salida de González Short que «se nos va un gran colaborador, un periodista ‘sui generis’ que llegó hace 12 años a nuestra casa periodística, constituyéndose en un gran aporte principalmente para todo aquello que es información de Comunidad, es decir para todo lo que nosotros definimos como noticias con Identidad Local. Fueron 12 años en Diario El Trabajo, una larga historia, con muchas anécdotas, pero también muchos momentos difíciles que se dan en cualquier grupo humano de trabajo, donde se comparte gran parte del día. Cómo olvidar los cierres de jornada de González, por ejemplo, es decir cuando él terminaba su labor y los demás continuábamos en el proceso de confección del diario. A menudo, en vez de irse, iniciaba conversaciones que por muy importantes que pudieran ser, no se podían dar en ese minuto porque estábamos contra el reloj. En fin, cosas sin importancia en realidad, pero que lo retratan fielmente. Eso sí, una cosa que nadie podía desconocer, era su capacidad de entrega, ese compromiso con su trabajo. Recuerdo una vez, llevaba un par de meses con nosotros y suena la sirena de Bomberos. De inmediato se levantó de su asiento, se subió a su moto y salió disparado a la emergencia… el único problema es que en ese momento no sabíamos ni siquiera dónde era la emergencia. En fin, anécdotas por montones, pero nadie puede desconocer que realizó un gran trabajo para nuestro medio, no solo en lo periodístico, también a través de muchas otras iniciativas que desarrolló en favor de Diario El Trabajo. Don Roberto, le deseamos lo mejor, fue un gran aporte y ojala algún día pueda regresar. Nuestras puertas estarán siempre abiertas para usted. Felicidades y mucho éxito en su nueva vida».
Todo el personal administrativo, periodístico y gerencial de Diario El Trabajo hoy agradecemos públicamente los doce años de entrega que Roberto González dio a nuestro medio, deseándole muchos éxitos en su nuevo proyecto de vida.