Doce funcionarios del hospital San Camilo fueron reconocidos por el Consejo Consultivo y de Desarrollo que pertenece a este centro asistencial, como una manera de destacar la actitud y el trato que brindan a los pacientes.
Como representantes de la gente de la comuna que se atiende en el hospital sanfelipeño, el Consejo Consultivo y de Desarrollo realizó durante el año, un trabajo exhaustivo para determinar aquellos funcionarios que se destacaron por el buen trato dado hacia el paciente, junto con la atención médica o en el área donde se desempeñan.
«Y es un trabajo un poco difícil, porque se requiere averiguar bien, que no hayan problemas con las personas, y tenemos el apoyo de los voluntariados del hospital que nos recomiendan personas, trabajamos mucho con las felicitaciones que se dejan estampadas en la OIRS por los usuarios del hospital y así vamos juntando uno a uno y escogiendo a las personas que vemos que se están destacando en esta área», señaló Max Riquelme, Presidente del Consejo.
Riquelme, al entregar los reconocimientos, señaló que en general es más fácil reclamar y que es difícil que una persona entregue una felicitación, aunque existen.
«Siempre la persona cuando está molesta, manifiesta su reclamo por la mala atención, pero cuando las personas reciben una buena atención es más difícil, porque consideran que es lo que corresponde, entonce es más difícil que una persona llegue a colocar una felicitación, es que debe sentirse atendida por sobre lo que espera y eso es muy difícil en toda área, y tenemos una buena cantidad de felicitaciones y eso reconoce que estas personas hicieron un trabajo un poquito más allá de lo que se esperaba, ya sea como secretaria, como encargada del aseo, como médico, porque aquí se reconoce a todas las personas, no sólo a los doctores que son las caras más visibles de la atención», dijo Riquelme.
Además de las personas reconocidas, también fueron destacados los servicios de Medicina, Dental y de Urgencia.
Uno de los profesionales destacados fue Guillermo Fernández Guzmán, médico pediatra, con una trayectoria profesional de 30 años.
«Uno no espera el reconocimiento, porque no merezco muchas cosas, pero me siento bien tratando de hacerlo bien con los pacientes, trato de hacer lo mejor posible con esas personas que uno atiende se sientan bien, respetados y que sus hijos son iguales a todos. En esto no se puede actuar, es ser como uno es, y las personas se sienten bien, eso es lo que a mí me importa, que la persona se sienta bien, el trato que le dan como humano, no como un número y eso es muy importante».