Delito se cometió en Américo Vespucio:
La sorpresa de su vida se llevó un conductor oriundo de Llay Llay que, cuando celebraba el aniversario número 27 de matrimonio, fue secuestrado por desconocidos, quienes además le robaron su camión mientras transportaba manzanas de exportación a Valparaíso.
Según indicó la propia víctima, mientras estuvo secuestrado permaneció en una habitación por un lapso de cuatro horas, siendo liberado a eso de las seis de la mañana.
El afectado es Pedro Valencia Gallardo, quien en conversación con nuestro medio señaló que este hecho ocurrió el día viernes 24 de este mes, alrededor de las 01:42 horas más o menos: “Yo venía viajando desde El Olivar en Rancagua hacia Valparaíso, con una carga de manzanas de exportación. Ese día andaba con mi señora porque estábamos celebrando los 27 años de matrimonio que tenemos, y antes de llegar al cruce de Américo Vespucio, ya que venía por General Velásquez, venía un auto negro delante de mí. Ese auto hizo el mismo recorrido que hice yo, bajó hacia Vespucio y llegando a la caletera hay un lomo de toro, en ese lomo de toro se bajan tres individuos armados y me abordan, me quiebran el vidrio del lado de la puerta, me abren la puerta y empiezan a forcejear conmigo, a tirarme para abajo del camión. En ese instante mi señora abre la puerta del lado de ella y se baja del camión y sale arrancando, ahí me quitan el camión y a mí me echan adentro del auto y me llevan… me secuestran, me tuvieron desde ese horario, más menos de las dos de la mañana aproximado. Me encerraron en una habitación y ahí me tuvieron hasta que me soltaron que fue a las 06:15 horas de la mañana. Esa fue la experiencia que tuve de secuestro, me robaron todo, me dejaron en short y polera, se llevaron la carga”, dijo Pedro Valencia Gallardo, el conductor afectado.
– ¿Después apareció la rampla?
– Claro, apareció la rampla ya vacía y lo que no se ha encontrado es el camión, el tracto camión, ellos dejaron la rampla botada.
– ¿Dónde encontraron la rampla?
– La rampla fue encontrada en Paine, en una calle que no tiene salida, que está por la orilla de la línea, ahí se encontró la rampla. Me imagino que la mercadería tiene que haber quedado en esa comuna, si es que la rampla estaba por ahí.
– ¿Características del camión?
– Este es un camión Kenworth, color blanco, cabina blanca. Es un camión poco común, acá en Chile hay muy pocos de esos camiones, entonces es fácil de reconocerlo. Yo creo que ahora no se ha encontrado porque debe estar escondido, después el camión lo vieron alrededor de las seis de la mañana por Buín, el puro choco y sin patente, después lo vieron en el sector de Nos y lo vieron en Calera de Tango; la última persona nos informó que lo vio en el cruce de Lolenco en las cercanías de Curacaví.
– ¿Cómo vivió esos momentos, muy lesionado, choqueado?
– Me golpearon con una arma de fuego en los brazos, me rompieron la cabeza, así es fueron momentos bien delicados, porque uno no sabe lo que va a ocurrir; si lo están golpeando con un arma, no sabe lo que va a pasar.
– ¿Qué hizo su señora, logró escapar?
– Sí, mi señora logró escapar porque ella, mientras me bajaban a mí, ella como iba sentada en el asiento del copiloto, bajó por ahí, porque fue violento el asalto. Si en primera instancia lo que hicieron fue que con la cacha del arma le pegaron al costado del vidrio, saltando para todos lados. Ahí mi señora se puso a gritar, comenzó a gritar, gritar y a gritar mientras que a mí me tiraban para abajo. Yo estaba con el cinturón de seguridad, no podía salir, y como yo no bajaba luego, me empezaron golpear; entonces en esa instancia mi señora se bajó, no sabe si saltó o lo que hizo, pero ya se perdió mi señora de ahí.
– ¿Se fue a algún lado?
– Ella empezó a pedir ayuda en la ruta, porque esto son fracciones de segundos. A mí me llevaron, desapareció el camión y ella empezó a hacer parar vehículos. Ninguno le prestó ayuda, porque se debe asustar la gente, es algo lógico, pero no se detiene; por otro lado habían unos muchachos que vieron todo, ellos estaban en panne con su auto, tenían un neumático pinchado; esto yo no lo vi, es lo que me relató mi señora, entonces me dice que esos muchachos se acercaron a ella, le dio miedo, pero le dijeron que no se preocupara, que la iban a ayudar, que no le iban a hacer daño, y ellos llamaron a Carabineros. Esto fue como a la 01:42 y a las 02;00 horas Carabineros ya estaba ahí.
– ¿Efectuaron patrullaje con los datos de la denuncia?
– Nooo, se llevaron a mi señora y de ahí la gestión no ha sido de lo mejor.
– ¿Su señora después de Carabineros se vino a Llay Llay?
– Carabineros se comunicó con los de Llay Llay, porque nosotros somos de Llay Llay.
– ¿De qué parte de Llay Llay?
– De la Villa Padre Hurtado. Ellos mandaron a una patrulla a la casa de mi hermano, ella le dio la dirección y ahí ellos avisaron.
Cuenta que el camión es de su propiedad, por lo cual le quitaron su fuente laboral; “con una situación económica mala, ahora uno queda de brazos cruzados porque igual ha estado muy mala la situación, el trabajo para nosotros como transporte, pequeña empresa, no tenemos ninguna seguridad, no hay seguridad para andar en la ruta, no hay seguridad donde quedarse, el combustible está elevado, entonces nosotros no competimos con nadie, o sea nosotros vivimos el día a día”, dice Pedro Valencia Gallardo.
Al finalizar reitera la poca seguridad que tiene este rubro, asegurando que antes viajaba mucho con su hija; “¿Se imagina si hubiera andado con mi hija?, las personas que efectuaron este asalto son jóvenes de una edad de 20 años, son flaites, por como ellos hablan uno se da cuenta de cómo son”, indicó el afectado.
Dice que la manzana de exportación iba en dirección a Colombia.
Avaluó todo en la suma de 44 millones de pesos.
Reiteró que es su única fuente de trabajo, por eso apela a la comunidad para que entregue cualquier información.