- Magro botín se llevaron delincuentes que trabajaron arduamente para ingresar al servicio público, donde finalmente no encontraron especies de valor con las cuales huir.
Si no fuera por los 27.000 pesos que encontraron, el esfuerzo de al parecer varias horas de trabajo, se habría perdido para los autores del robo que afectó al Registro Civil y que quedó al descubierto pasadas las 07:00 horas de ayer.
Se supone, que fueron dos los delincuentes que actuaron y que lograron hacer dos forados en el techo de la unidad ubicada en Calle Santo Domingo 236-B, por donde accedieron a las dependencias y revisaron todo, dejando tras su paso por el lugar un gran desorden, las cédulas de identidad revueltas en el piso, así como la caja fuerte –donde no había dinero- con serios daños, aunque finalmente no la pudieron abrir.
Dos o tres veces se activó entre la tarde del sábado y la madrugada del lunes el sistema de alarmas del Registro Civil. Personal de la empresa que les presta el servicio acudió a la unidad, pero sólo habrían mirado por fuera y al no detectar nada extraño, se retiraron sin llamar a la Oficial Civil para notificarle de lo sucedido, por lo que en el momento no se pudo ingresar a las instalaciones ni avisar a Carabineros.
Por fortuna, los antisociales no se llevaron las cédulas ni los pasaportes, lo cual habría constituido un grave perjuicio para los usuarios del servicio, que tendrían que haber hecho todo el trámite de nuevo.
Debido al robo, la atención no se inició sino hasta pasadas las 12:00 horas, lo que generó gran molestia entre el público que manifestó de paso su preocupación por la posible sustracción de las cédulas de identidad, lo que finalmente fue descartado de plano.
En el Registro Civil se hizo presente personal de Carabineros que adoptó el procedimiento de rigor, en tanto que efectivos de la Sección de Investigación Policial (SIP) realizaron algunos peritajes en el sitio del suceso, para establecer por ejemplo, si los antisociales dejaron sus huellas digitales, lo que podría ayudar a su identificación.
Consultado el teniente Miguel Jiménez, de la Segunda Comisaría de San Felipe, manifestó que “un trabajador del Registro Civil constató el robo, quedando en claro que los delincuentes solo buscaban dinero, ya que había computadores, cámaras fotográficas y otras especies de valor, pero no las sustrajeron”.
Añadió que “le hicieron palanca a la caja fuerte, pero no pudieron abrirla y aunque lo hubiesen hecho, habrían encontrado muy poco dinero, por lo tanto solo se llevaron la suma de 27.000 pesos”.
Hay que consignar también que el pasado mes de noviembre, desconocidos trataron de robar en este servicio público.
Así mismo hay que destacar que Diario El Trabajo intentó obtener una versión de los hechos de parte de la Oficial Civil María Isabel Villarroel, sin embargo esta funcionaria declinó entregar declaraciones, indicando que no está autorizada para hablar con la prensa.