El paso del entrenador Luis Fredes por Unión San Felipe, desde su inicio estuvo cargado de polémicas, siendo una de las más recordadas su decisión de alejar forzosamente a muchos jugadores de las series inferiores albirrojas.
No exenta de críticas y desaciertos, fue también su paso por el primer equipo, el cual bajo su batuta cumplió una pobre presentación en los números y en el juego, situación que lo hizo ganarse la antipatía de una hinchada que en cada partido le hacía ver su desaprobación al profesional que ahora está a cargo de Deportes Colchagua, club perteneciente a la Segunda División chilena.
Cuando ya parecía que el nombre y apellido de Luis Fredes no era más que un triste recuerdo en las tierras albirrojas, ayer volvió a tomar notoriedad, luego que se supiera de la millonaria demanda que entabló contra el Uní, aduciendo un despido injustificado.
El gerente general unionista, Eduardo Olivares, confirmó que el técnico demandó al club, aunque fue claro en que el despido se ajustó totalmente a la ley, ya que Fredes habría tenido problemas graves con algunos padres de cadetes, lo que obligaron al club a poner fin de manera adelantada a su contrato. “No nos quedó más alternativa, fueron cosas que no se podían dejar pasar”, declaró el directivo, que no se cerró a la posibilidad de llegar a un acuerdo con la contraparte, “a veces es mejor un mal arreglo que un buen juicio”, agregó.
Ese gallo mala leche
SOLO UNA PALABRA HUEVON PENCA.
DE ENTRENADOR NO TIENE NADA.
MAS MALO QUE EL CORNEJO.