Como una victoria aplastante y categórica, que de paso le permite volver a meterse en la parte más alta de la tabla de posiciones, puede catalogarse el 4 a 1 que el sábado último propinó Unión San Felipe a Rangers de Talca.
En el juego que tuvo lugar en el estadio Municipal sanfelipeño, el cuadro albirrojo evidenció enormes progresos en la definición y puntada final en las labores ofensivas.
Impecables en su accionar estuvieron Nahuel Lujan, José Pablo Monreal y Mario Briceño. Otros que también estuvieron a la altura de las circunstancias al convertirse en piezas claves en el funcionamiento del equipo, fueron los volantes Gonzalo Espinoza, Gonzalo Jara y Francisco Valdez, quien mientras estuvo en el campo de juego demostró que puede darle a los de Lopez, mucha frescura y un pase largo que permitió hacer diferencias, al romper los cercos defensivos que quiso proponer el aproblemado cuadro talquino.
A diferencia de juegos anteriores en los cuales el Uní Uní se dio el ‘lujo’ de desperdiciar sus ocasiones de gol, en esta oportunidad los encargados de meter el balón en el arco rival estuvieron certeros.
El primer festejo aconcagüino corrió por cuenta de José Pablo Monreal. A los 4’ el espigado ariete abrió el marcador. Doce minutos después el mismo jugador puso la segunda diana del pleito, desatando la algarabía entre los poco más de 800 espectadores que se dieron cita en el reducto de la Avenida Maipú.
Si bien es cierto había un largo trecho por recorrer, el 2 a 0 pareció ser el golpe de gracia para un conjunto piducano que no mostraba el más mínimo poder de reacción. Los forasteros solo atinaron a contrarrestar lo que hacían los locales mediante el juego brusco y a veces mal intencionado, teniendo a su mejor intérprete al defensor Sergio Felipe. Este lateral derecho literalmente se aburrió de darle golpes a Nahuel Lujan. Otro que también ‘sobresalió’ en esas funciones fue Federico Illanes.
Rangers no tuvo argumentos futbolísticos para emparejar el pleito, y si en el 53’ llegaron al gol gracias a Exequiel Luna, fue solo por una desatención de la zaga sanfelipeña. El descuento fue una anécdota del partido. Eso, nada más.
Desde el banco unionista entendieron que no había que darle aire a los rojinegros, y por lo mismo se determinó en ingreso de Mario Briceño. El goleador y figura, entró encendido, como queriendo demostrar que debe seguir siendo el titular -Lujan se la puso difícil-, y por lo mismo desde que pisó el césped se mostró activo y con mucho protagonismo.
En el 63’ Mario Briceño dijo presente en el marcador al anotar un gol de buena factura. El 3 a 1 fue la lápida para los sureños, aunque eso no significó que los anfitriones quitaran el pie del acelerador, pasando por arriba de su dormido contrincante. Todo eso la barra visitante pareció no aceptarlo, y como muestra de repudio al poco compromiso y amor a la camiseta de sus jugadores, algunos miembros de ella violentaron una puerta para hacer ingreso al campo de juego con el objetivo de ‘apretar’ al plantel. Acción repudiable, que no debe ser aceptada ni respaldada por nadie, por más que haya desesperación al ver que el club de sus amores empieza a hundirse en el fango.
Unión San Felipe quedó indiferente a esa situación, por lo que cuando se reanudó el juego, siguió aplicando su plan de demolición. La guinda de la torta la puso en el quinto minuto (90+5) de adición, Mario Briceño.
Con este triunfo ‘El Gigante Del Aconcagua’ llegó a los 39 puntos, entreverándose nuevamente en la pelea por el título de la serie B del fútbol profesional chileno.