Tras culminar el acto de apertura de la preparación de juicio oral, el Tribunal de Garantía acogió en un cien por ciento las pruebas presentadas por el Ministerio Público para acusar por tres delitos a Manuel Leiva Rojas, único imputado por el robo con violencia e intimidación calificado por homicidio, siendo víctima Cristián Pizarro Maulén, quien falleció por una herida a bala en el cuello y cuyo juicio se vislumbra para el próximo mes de abril.

Los cargos se suman con el delito de daños en contra de un vehículo de otra víctima, que observó a Leiva Rojas con un rifle que apuntaba a su móvil, para luego disparar sobre el capot de este, provocando que su conductor perdiera el control y se desplazara hasta la vereda, para posteriormente, atemorizado, huyera hasta otro sector, desde donde llamó a Carabineros, sin saber que minutos más tarde, Leiva, de la misma manera interceptaría la camioneta de Pizarro Maulén y cometería el crimen en la comuna de Catemu.

Alrededor de las 07:00 de la mañana del día 3 de abril del 2011, cuando la víctima, Cristián Pizarro Maulén, un amante de la cacería, conducía su camioneta acompañado de su hijo de iniciales G. P. L. y su amigo R. V. O. por la avenida Balmaceda de la comuna de Llay Llay, fueron interceptados por el imputado Manuel Eduardo Leiva Rojas, de 19 años de edad, quien se encontraba en medio de la calzada, premunido de una escopeta con la cual los apuntó para obligarlos a detenerse, sin darse cuenta que el imputado había cometido la misma acción con otro vehículo al cual disparó.

Leiva, aparentemente bajo los efectos del alcohol y las drogas, se acercó apuntando con el arma a la víctima para ingresar hasta el asiento trasero del copiloto, exigiendo que los acompañantes de Pizarro (hijo y amigo) descendieran del vehículo. Al reanudar la marcha, Leiva obligó a la víctima a dirigirse hasta la ruta 60 CH para detenerse en el sector rural de El Paltial de Catemu.

Estando en ese lugar Leiva descendió de la camioneta y soltó a dos perros que estaban en el pick up de la camioneta y aparentemente, a escasa distancia, ejecutó el disparo con el arma de fuego en la región supra esternal (debajo del cuello) de Cristián Pizarro, provocándole un traumatismo en la columna vertebral y médula espinal, según el informe emitido por el Servicio Médico Legal, como causal de muerte.

Posteriormente, Leiva huyó conduciendo la camioneta por la ruta F-301, siendo en el kilómetro 3, donde impactó el móvil contra un poste del alumbrado público, obligándolo a escapar a pie, llevándose consigo un teléfono celular touch, marca Nokia, desde donde realizó y recibió llamadas de la familia de Pizarro, que contestó Leiva, además de apoderarse de una escopeta de caza de propiedad del occiso.

Asimismo, la Fiscalía acusa al imputado por un hecho cometido el 21 de noviembre del 2010 cuando interceptó a la víctima, José Luis Silva Vásquez, en la intersección de calles Meiggs con Luis Cruz Martínez, de la comuna de Llay Llay, a quien agredió con un arma blanca, causándole una herida en el costado derecho del tórax de carácter grave, acción que fue tipificada como homicidio frustrado simple, por lo que se requerirá adicionalmente una condena de 5 años por este delito.

Esto significa que Leiva podría ser condenado a 25 años de presidio, cuando se curse el juicio oral, señaló el Abogado Asistente del Ministerio Público Jeremy Valdés Sarmiento «El proceso se encuentra en una etapa intermedia, específicamente en la preparación de juicio oral, en la que se dictó el acto de apertura, la cual tuvo por objeto depurar la prueba que se va a ofrecer y se va a presentar en el juicio oral. Por nuestra parte como Ministerio Público estamos satisfechos en el sentido que las pruebas que nosotros presentamos en la acusación, pasaron este filtro de depuración y finalmente va a ser presentado en la audiencia de juicio respectivo, que estará a la espera de cuál va a ser la fecha concreta que se va a fijar, estimamos que sería a comienzos del mes de abril de este año» precisó el profesional.

Valdés agregó que como Ministerio Público sus pruebas versan específicamente en las declaraciones del personal policial, peritos, como asimismo las armas que se encontraron aquel día de los hechos y finalmente declaraciones de algunas víctimas que tuvieron contacto con el imputado, sumándose las pericias realizadas en la reconstitución de escena llevada a cabo en el sitio del suceso.

En tanto la Defensa presentó informes periciales de un psicólogo y una asistente social, las cuales fueron excluidas por el Tribunal de Garantía en este acto de apertura y finalmente no serán presentadas en la audiencia de Juicio Oral.

Pablo Salinas Saldías

psalinas@eltrabajo.cl

 

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