Anyelin Muñoz, con su perra regalona en brazos y que había muerto momentos antes, señaló que desde a lo menos dos semanas a la fecha han estado muriendo sus mascotas.Anyelin Muñoz, con su perra regalona en brazos y que había muerto momentos antes, señaló que desde a lo menos dos semanas a la fecha han estado muriendo sus mascotas.
Anyelin Muñoz, con su perra regalona en brazos y que había muerto momentos antes, señaló que desde a lo menos dos semanas a la fecha han estado muriendo sus mascotas.
Anyelin Muñoz, con su perra regalona en brazos y que había muerto momentos antes, señaló que desde a lo menos dos semanas a la fecha han estado muriendo sus mascotas.

PUTAENDO.– La familia Muñoz Vergara, de Tabolango, denunció públicamente el cruel y sistemático envenenamiento de sus perros por parte de vecinos de ese sector.
Anyelin Muñoz señaló que desde a lo menos dos semanas a la fecha han estado muriendo sus perros, muchos de los cuales su familia ha acogido luego que éstos son abandonados en el sector, y lo más extraño es que no se trata de un envenenamiento de animales que afecte a vecinos, sino que puntualmente está afectando el domicilio de sus padres, ya que los perros han comido el veneno en el perímetro de la vivienda.
Esta joven que al momento de ser entrevistada por nuestro medio tenía su perra regalona en brazos, la cual había muerto momentos antes de una manera horrible y luego de agonizar por cerca de 15 minutos, indicó que es muy extraño que el veneno sea constantemente arrojado a su sitio, incluso la perrita que murió llegó con un trozo de carne en su hocico, que presumiblemente fue rociado con insecticida.
A esta situación se suma que los vómitos de los canes que han muerto que superan los siete, han sido comidos por gallinas y gansos que también han muerto a los pocos minutos, dejando en evidencia que se trataría de un poderoso veneno.
Lo más grave que denunció Anyelin Muñoz, es que algunos de sus mascotas son sumamente regalonas, incluso, la última perrita que murió dormía junto a ella y algunos sobrinos, por lo que sienten temor de que el veneno pueda afectar la salud de la familia y señaló que no tan solo es una crueldad envenenar sus animales, sino que tienen temor que algunos de sus familiares se pueda ver afectado, agregando que también sus padres viven con el alma en un hilo pensando que sus cabras, a lo cual se dedican por mucho años y que les permite producir quesos, puedan ser los próximos animales que resulten envenenados.
Anyelin y su familia mantienen sospechas sobre algunos vecinos que podrían estar detrás de este sistemático envenenamiento, por lo que decidieron realizar la denuncia ante Carabineros e incluso ante el SAG, agregando que llegarán hasta las últimas consecuencias con tal que estos casos de envenenamiento y maltrato animal no sigan afectando a sus animales.
Patricio Gallardo M.

Por Diario El Trabajo

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