- Dramática situación enfrenta vecino sanfelipeño, agobiado por deudas y problemas de salud.
Desesperado y pasando hambre, así se encuentra Jeraldo Figueroa, uno de los extrabajadores de la empresa de parquímetros de José Hidalgo que operó en San Felipe, a quien le debiera llegar parte de los 370 millones de pesos que la municipalidad debiera cancelar a los extrabajadores que demandaron y ganaron en tribunales. Pero hasta el momento no ha pasado nada.
Lo encontramos caminando en la calle junto a su señora. Ahí nos contó el drama que está viviendo. Más ahora que está perdiendo la memoria, posiblemente sea Alzheimer, situación que no lo deja trabajar.
– ¿Usted era trabajador de parquímetros?
– Correcto.
– ¿Hay cierta preocupación por la demora en el pago de la indemnización?
– Preocupación totalmente, estamos en una mala situación, con deudas de arriendos, luz, agua. Hay que comprar gas, mercadería y en el momento no tenemos como hacerlo, estamos totalmente críticos, más encima yo enfermo con una pérdida de memoria. Ahora me están viendo en el hospital para saber de qué se trata todo esto. Para mí es un poco complicado, estamos desesperados porque en cualquier momento nos pueden quitar el arriendo y la verdad padeciendo de hambre porque realmente no tenemos como comprar lo que comprábamos antes que era la mercadería, y por ahí por allá de repente caen unas moneditas, pero pocas… que alcanzan para una cosa y estamos faltos de otras. La verdad que a mí me gustaría haber conversado en la muni con la persona indicada sobre esta deuda que nos tienen, si es posible que nos cancelen lo que nos están debiendo para con eso poder solucionar todo lo que tenemos que solucionar, pago de deudas y un montón de cosas. Hay deudas grandes que no se han podido pagar y eso a mí personalmente me desespera de una forma muy grande, creo que también estoy teniendo problemas al corazón. Lo que me explicaba que podría ser eso de las preocupaciones, todo lo que está pasando con esta cuestión de no tener como subsistir, esa es la realidad. Yo quisiera pedirle a la muni que tengan un poquito de piedad, hay gente que está mal, si ya cuanto tiempo estamos sin trabajo, sin nada, la verdad que no tenemos qué hacer ya.
– Claro porque usted sería uno de los beneficiados con el pago de esta indemnización de 370 millones de pesos a repartir entre los trabajadores.
– Exacto, yo creo que sí. Si tambien estoy metido en el mismo bollo y también fui parquímetro de ese tiempo cuando quedó la escoba. Ahí estuve trabajando un poco y ahora ya no puedo trabajar de ninguna manera, si no me dejan trabajar porque no puedo. Yo estaba restaurando muebles y ahora me lo prohibieron estrictamente porque yo no puedo trabajar con herramientas eléctricas ni con filo, porque puedo tener un accidente mayor y ahí sí que quedaría la crema. Así es que no puedo trabajar de ninguna manera.
– ¿Se está haciendo exámenes don Jeraldo?
– Sí, me estoy haciendo exámenes, me han hecho hartos exámenes, en la mañana fueron a hacérmelos directamente a la casa y vamos a ver los resultados en tres días más, según me dijo la persona que me los hizo. Me hizo exámenes de sangre y así todo lo que sea necesario para poder descubrir realmente de qué se trata lo mío.
– ¿Pierde la memoria?
– Sí, pierdo la memoria, quedo ¡plop!, no me doy cuenta donde estoy.
– ¿Se ha perdido algunas veces?
– Sí, me he perdido cuatro veces ya e incluso en la misma casa de repente desconozco… la casa, no sé dónde estoy, y la señora tiene que estar preocupada de mí. Porque no vaya a dejar la escoba con el gas en la cocina y todas esas cosas, y ahora ella me saca a caminar porque según eso hace bien, de salir a caminar, pero acompañado, yo no puedo andar solo en ningún momento ahora.
– Si cancelaran esta indemnización, ¿se podría hacer exámenes en forma particular para apurar el diagnóstico?
– Por supuesto que sí, sería lo ideal porque ya solucionaría la parte económica que está totalmente mala… malísima. Si fueran a la casa a comprobar este asunto se van a encontrar con una realidad, yo no estoy hablando cosas por querer decirlas o no. Si digo esto es porque es lo que me está pasando. Yo cuento una realidad, es la vida que estoy llevando en este momento.
– ¿Entonces pedir a la municipalidad públicamente que apuren el pago de la indemnización?
– Sí, que vean las posibilidades de que nos cancelen esa plata. Porque realmente nos hace falta, si no hay otro medio. Si tuviéramos otro, a lo mejor nosotros estaríamos tranquilos, yo estaría tranquilo, pero lamentablemente no hay nadie más en que yo pueda acudir para solucionar estos problemas.
– El caso suyo es dramático
– Claro, el caso mío es dramático, totalmente dramático. Sería una solución grande para mí. Porque a lo mejor podría ver un médico particular con mejores remedios, mejor medicina.
– Apurar todo ese proceso, tener un diagnóstico, porque todavía no tiene uno.
– No, en tres días más, según me dijo la señorita que fue a la casa a hacerme los exámenes y saber realmente que hay sobre mí.
– ¿Qué piensa usted don Jeraldo que puede ser?
– No sé, yo pienso que esta cuestión es el Alzheimer. Creo yo que puede ser eso. Porque mi mamá murió de esa enfermedad, ella sufrió 6 años con esa enfermedad, y yo soy el que la está heredando y esto me vino de un rato a otro, si yo estaba bien, estaba totalmente bien de salud, y esto me pasó de un rato a otro, primeramente me perdí en Los Andes, andábamos haciendo un trabajo allá de restauración de muebles y me pasó allá primero, y después acá en San Felipe me ha pasado tres veces ya que me he perdido, pero me he perdido totalmente y ahora no puedo andar solo, tiene que andar mi señora conmigo, no me pueden dejar solo en ningún momento.
– Reiterar el llamado a la municipalidad para que pague esta indemnización.
– Pucha yo le agradecería si ellos pudieran hacer esto y apurar un poquito la causa. Porque yo realmente la necesito de verdad.
Señalar que son unos 370 millones de pesos que se deben repartir entre un grupo de extrabajadores de la empresa de parquímetros de José Hidalgo que estuvo operando en San Felipe. En todo caso ya hay una sentencia. Sólo queda que el municipio pague.