- Según indicaron desde la DAEM, el menor habría llevado el arma para defenderse de eventuales amenazas externas al colegio.-
Un grave incidente se registró el pasado jueves en el Liceo San Felipe de nuestra ciudad, cuando un menor de 17 años ingresó al establecimiento con un arma hechiza oculta. El adolescente le pasó esta arma a una compañera para que se la guardara, y fue esta última quien dio aviso a una profesora, quien posteriormente dio cuenta de esta situación al equipo directivo.
Fue el mismo equipo directivo quien posteriormente llamó a la Policía de Investigaciones para dar cuenta de esta situación, tal como dicta el protocolo.
El hecho generó que el estudiante en cuestión haya sido expulsado del Liceo San Felipe.
La directora de la Dirección de Administración de Educación Municipal (DAEM), Natalia Leiva, señaló que esta es «una situación bien compleja a nivel estudiantil, es un estudiante de 17 años que más que fue sorprendido directamente, una de sus compañeras advirtió la presencia de esta arma, se lo advirtió a la profesora jefe y ella dio a conocer esta situación al equipo de gestión, y ellos actuaron según los protocolos que tenemos dentro del establecimiento y se llama directamente a la PDI».
En este mismo sentido, Leiva agregó que «estos hechos ocurren el día jueves en el transcurso de la mañana y el estudiante menciona que él ha tenido situaciones externas al establecimiento, donde había sido amenazado por personas que no son directamente del establecimiento, y necesitaba resguardarse de estas personas que lo estaban como amenazando».
Asimismo, la directora de la DAEM indicó que es primera vez que se produce un hecho de estas características, «un hecho como este es la primera vez que la tenemos, no habíamos tenido presencia de armamento de este tipo, es un arma hechiza que no tenía percutor, que no tenía algún tipo de bala, era solamente estos fierros que componen esta arma hechiza», detalló.
Respecto de las medidas disciplinarias para el estudiante, Natalia Leiva aseguró que «en este caso tenemos un proceso de aula segura, una ley que se establece años atrás, y en la que se va a aplicar hoy para el estudiante, él va a quedar suspendido de clases, va a ser expulsado del establecimiento educacional».
En este mismo contexto, y considerando que acudió la PDI, el menor pasó por control de detención quedando con medidas cautelares. «El menor tiene 17 años, por lo tanto, es imputable ante la ley, tiene arraigo nacional y tiene que entrar a un programa para acompañar este proceso, es un menor que tiene que ser atendido por un programa psicosocial», puntualizó la directora de la DAEM.
Finalmente, y ante la consulta de si es prudente colocar detectores de metales en los establecimientos, Leiva indicó que «es un poco complejo llegar a ese extremo, poner detectores de metales cuando tenemos un sistema que está funcionando, que los estudiantes están alertas, tenemos que potenciar esos factores protectores, más que trabajar desde el control y la detección de metales».